La industria del entretenimiento lamenta la partida de uno de los animales más icónicos en la historia del cine animado.
El mundo del cine y los fanáticos de Shrek recibieron con tristeza la noticia del fallecimiento de Pericles, más conocido como Perry, el burro que sirvió como modelo para el desarrollo del entrañable personaje de “Burro” en la saga de películas de DreamWorks Animation. Pericles murió este fin de semana a la avanzada edad de 32 años en un refugio animal en California, Estados Unidos.
Aunque el carismático “Burro” en Shrek se hizo mundialmente famoso gracias a la voz y personalidad aportada por Eddie Murphy, pocos sabían que el equipo de animación de DreamWorks utilizó a Pericles como referencia visual y de movimientos para dar vida al personaje.
Pericles, un burro de raza miniatura, fue seleccionado por su apariencia única y sus expresiones faciales, que ayudaron a capturar el tono cómico y amigable que los creadores buscaban. Durante la producción de la película, el animal fue filmado en múltiples sesiones para estudiar su andar, gestos y movimientos corporales.
Una vida de tranquilidad tras el estrellato
Tras su contribución a Shrek, Pericles pasó sus días en un santuario animal dedicado al cuidado de equinos retirados del espectáculo. Según los cuidadores, siempre fue un animal curioso y juguetón, que disfrutaba de la compañía humana y de sus compañeros en el refugio.
“Pericles tenía una energía especial, como si supiera que de alguna manera había dejado su huella en el mundo. Aunque no era una estrella de Hollywood en el sentido tradicional, su legado vivirá para siempre a través de ‘Burro’,” comentó Julia Sánchez, directora del refugio.
La noticia de su fallecimiento ha conmovido a los fanáticos de la saga y a los animadores que trabajaron en Shrek. A través de redes sociales, muchos expresaron su gratitud y nostalgia por el animal que inspiró a uno de los personajes más memorables del cine animado.
DreamWorks Animation también emitió un comunicado oficial:
“Estamos profundamente agradecidos por la inspiración que Pericles nos brindó. Su espíritu vivirá eternamente en las risas que ‘Burro’ sigue generando en todo el mundo. Gracias por ser parte de nuestra historia”.
El legado de Pericles trasciende la pantalla, recordándonos cómo los animales han contribuido de manera inesperada a la magia del cine. Descansa en paz, Pericles, el burro que nos enseñó a todos a ser un poco más divertidos y auténticos.