El líder de la Iglesia Católica, todavía cansado por la gripe que lleva padeciendo, dirigió algunas palabras de saludo pero luego dejó leer el discurso preparado a monseñor Ciampanelli.
(EFE) – El papa Francisco afirmó este sábado que tiene “bronquitis” y prefirió que un colaborador leyese su discurso con motivo de la inauguración del año judicial del Tribunal del Estado de la Ciudad del Vaticano, después de pasar varios días con gripe y acudir al hospital para unas pruebas.
“He preparado un discurso, pero como podeis ver, no soy capaz de leer debido a la bronquitis. Le pedí a (monseñor Filippo) Ciampanelli que lo leyera”, dijo el líder de la Iglesia Católica, con la voz afectada y que a pesar de ello ha mantenido su agenda de hoy, con varias audiencias además de la inaguración judicial.
Francisco, todavía cansado por la gripe que lleva padeciendo desde hace días, dirigió algunas palabras de saludo, pero luego dejó leer el discurso preparado a monseñor Ciampanelli.
También este viernes fue este colaborador el que leyó los discursos, aunque mantuvo todos los actos previstos.
El secretario de Estado vaticano, el cardenal Pietro Parolin, confirmó este jueves que el papa “se encuentra bien” y las pruebas a las que se sometió en el hospital Gemelli de la isla Tiberina, en el centro de Roma, fueron “rutinarias” después de pasar varios días con gripe.
“El Santo Padre se encuentra bien, lo vi anoche, hizo una visita de rutina y me dijo que no tiene ningún problema y que también se ha recuperado de la gripe“, aseguró Parolin en declaraciones a TV2000.
El pasado lunes, el Vaticano informó de que persistían “los leves síntomas gripales, aunque sin fiebre“, pero que por precaución se habían suspendido las audiencias previstas.
El pontífice si celebró el pasado domingo el tradicional rezo dominical del ángelus asomado a la ventana del palacio pontificio y leyó con buena voz ante los miles de fieles reunidos en la plaza de San Pedro del Vaticano.
A finales de noviembre, el papa sufrió una bronquitis por la que tuvo que anular algunos de los actos y celebrar el ángelus en privado y también ser sustituido por un colaborador para leer sus discursos.
Para permitir su recuperación, el pontífice argentino anuló el viaje previsto a principios de diciembre a Dubái para participar en la cumbre del clima.
Pero después se recuperó totalmente e incluso el 8 de diciembre acudió a la plaza de España al tradicional homenaje a la Virgen de la Inmaculada.