Qué es ISIS-K, el grupo terrorista que se adjudicó el atentado en Kabul

Por CNN Chile

27.08.2021 / 08:04

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En mayo, la organización atacó una escuela para niñas y mató al menos a 68 personas. Expertos indican que el grupo ha reforzado su presencia en el este de Afganistán y ha formado células en la capital.


(CNN Español) – El atentado terrorista perpetrado en el aeropuerto de Kabul en Afganistán, que dejó decenas muertos y más de 100 heridos, ha dirigido la mirada a un grupo terrorista con un nombre familiar: ISIS-K, que se atribuyó el ataque.

El Estado Islámico de Khorasan, también conocido como ISIS-Khorasan, ISIS-K, IS-K o ISIL-K, es una rama del grupo terrorista ISIS que surgió por primera vez en Siria e Iraq, y si bien las afiliadas comparten una ideología y tácticas, la profundidad de su relación con respecto a la organización y el mando y control nunca se ha establecido por completo.

El nombre del grupo proviene de su terminología para el área que incluye Afganistán y Pakistán, y que ellos llaman “Khorasan“.

Expertos indican que el grupo, conformado por algunos yihadistas veteranos de Siria y de otros lugares, ha reforzado su presencia en el este de Afganistán y ha formado células en Kabul.

Según un reporte de las Naciones Unidas (ONU) a pesar de las pérdidas territoriales, financieras, de liderazgo y de personal sufridas en 2020 en las provincias de Kunar y Nangarhar, Estado Islámico en Iraq y el Levant-Khorasan (ISIL-K) continúan representando una amenaza para Afganistán como para la región. En total, se estima que hay entre 1.500 y 2.200 combatientes en Afganistán.

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¿Quiénes conforman a ISIS-K?

Oficiales de inteligencia estadounidenses dijeron previamente a CNN que entre los miembros de ISIS-K está “un pequeño número de yihadistas veteranos de Siria y otros combatientes terroristas extranjeros“, y dijeron que Estados Unidos había identificado a entre 10 y 15 de sus principales operativos en Afganistán.

Muchos de ellos son exintegrantes del movimiento talibán que se pegaron el parche de ISIS para autonombrarse como los más grandes y malos en la calle”, dijo a CNN Peter Bergen, autor del libro “The Rise and Fall of Osama bin Laden”.

Bergen explica que ISIS-K es un enemigo de los talibanes. “Los talibanes los están combatiendo. Realmente, ya sabes, es más una rivalidad local”.

“Por una serie de razones, desde ideológicas a políticas y militares. Francamente, ISIS no cree en la agenda política. ISIS cree que solo Dios puede gobernar y aunque los talibanes están tratando de establecer un emirato islámico, eso es no es suficiente para ISIS. ISIS es un poco más extremo”, explicó a CNN el analista experto en terrorismo Colin Clarke.

Según Clarke, ISIS-K es más draconiano que los talibanes, ya que en las zonas que controlan, explica, imponen una estricta la ley sharía, y ejecutan a civiles y otros bajo la sospecha de ser espías.

Quieren atraer y reclutar a los sociópatas más entusiastas del país. Y su tarjeta de presentación es esta, ya sabes, violencia rapaz y desenfrenada contra cualquiera que se interponga en su camino. Eso realmente les ayuda a incorporar a otros combatientes a la organización que tienen una mentalidad similar”, dijo Clarke.

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Atentados recientes

El Estado Islámico de Khorasan (ISIS-K) se atribuyó este jueves la autoría del atentado suicida cerca del aeropuerto de Kabul e indicó que el nombre del atacante suicida es “Abdul Rahman al-Logari“.

El brazo mediático de ISIS, Amaq, proporcionó una foto de quien afirma que es el atacante e indicó en un comunicado que su “combatiente” fue capaz de superar todas las fortificaciones de seguridad, llegando a una distancia de “no más de cinco metros de las fuerzas de Estados Unidos“.

Sin embargo, el grupo terrorista no aportó ninguna prueba para respaldar la afirmación.

En la tarde de jueves, al referirse al atentado, el presidente de Estados Unidos Joe Biden dijo que “vamos a perseguir a los responsables y los vamos a hacer pagar, no pararemos la evacuación, esos terroristas de ISIS no van a ganar”.

El inspector general para la Reconstrucción de Afganistán, una oficina independiente creada por el Congreso de EE.UU, dijo en un reporte, que cubría los meses de abril a junio de este año, que “ISIS-Khorasan aprovechó la inestabilidad política y el aumento de la violencia durante el trimestre atacando objetivos e infraestructura de minorías sectarias para esparcir el miedo y destacar la incapacidad del gobierno afgano para proporcionar la seguridad adecuada”.

ISIS-K ha formado células en Kabul que han llevado a cabo una serie de devastadores ataques suicidas dentro y fuera de la capital afgana desde 2016.

Por ejemplo, en mayo de este año, ISIS-K atacó una escuela para niñas en Kabul y mató al menos a 68 personas, hiriendo a más de 165, según una evaluación de la Agencia de Inteligencia de Defensa citada por el inspector general. Y en junio, al menos 10 personas murieron y otras 16 resultaron heridas en un ataque contra la organización benéfica británico-estadounidense HALO Trust. ISIS-Khorasan se atribuyó la responsabilidad del ataque al campo en la provincia nororiental de Baghlan.

El grupo ha construido una presencia en el este de Afganistán en los últimos años, especialmente en las provincias de Nangahar y Kunar. En agosto pasado, el grupo atacó la prisión principal de Jalalabad, la capital de Nangahar, en un esfuerzo por liberar a decenas de sus partidarios que habían sido capturados por el Ejército y la Policía afganas.