Steven Sund dio un paso al costado este jueves luego que centenares de adherentes al presidente estadounidense atacaran el edificio legislativo. "Estaban decididos a entrar al Capitolio causando grandes daños", afirmó tras su renuncia.
(CNN) — El jefe de policía del Capitolio de Estados Unidos, Steven Sund, renuncia en medio de críticas por una aparente falta de preparación para lidiar con la violenta turba del miércoles en Capitol Hill.
La renuncia de Sund es efectiva el 16 de enero, según un funcionario de la Policía del Capitolio.
La presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, pidió el jueves la renuncia del Sund y dijo que el Sargento de Armas de la Cámara de Representantes le había dicho que también presentaría su renuncia.
Pelosi hizo sus comentarios durante su conferencia de prensa semanal y sigue al líder demócrata del Senado, Chuck Schumer, diciendo que despediría al actual Sargento de Armas del Senado cuando se convierta en líder de la mayoría.
“Si el sargento del Senado Stenger no ha dejado vacante el puesto para entonces, lo despediré tan pronto como los demócratas tengan la mayoría en el Senado“, dijo Schumer en un comunicado.
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Michael C. Stenger fue designado por el líder de la mayoría del Senado, Mitch McConnell, y se esperaba que Schumer eventualmente lo reemplazara cuando la cámara cambiara a demócratas. Pero Schumer está dejando en claro que Stenger debe renunciar o ser despedido a raíz de los eventos que ocurrieron, como parte de la creciente reacción a la mafia que irrumpió en Capitol Hill.
El jueves temprano, el liderazgo de la Policía del Capitolio proporcionó los primeros detalles sobre el incidente mortal que dejó a los legisladores y al personal temerosos por sus vidas.
En un comunicado emitido el jueves por la mañana, Sund detalló las acciones violentas de los alborotadores diciendo que la Policía del Capitolio y otros agentes del orden fueron “atacados activamente” con tubos de metal y otras armas.
“Estaban decididos a entrar al Capitolio causando grandes daños“, dijo Sund.
La Policía del Capitolio disparó contra una mujer adulta mientras “los manifestantes se abrían paso hacia la Cámara de Representantes donde los miembros del Congreso se refugiaban en su lugar”. Posteriormente, la mujer fue declarada muerta tras ser trasladada a un hospital cercano. El oficial involucrado fue puesto en licencia administrativa en espera de una investigación conjunta con la Policía del Capitolio y el Departamento de Policía Metropolitana.
Sund también dijo que la Policía del Capitolio respondió a los informes de bombas caseras y un vehículo sospechoso en la esquina sureste del Capitolio, y agregó que la policía del Capitolio “determinó que ambos dispositivos eran, de hecho, peligrosos y podrían causar un gran daño a la seguridad pública”.
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El FBI está investigando más el incidente.
La Policía del Capitolio reveló por primera vez que 13 personas han sido arrestadas por “ingreso ilegal” al complejo del Capitolio, además del dueño del vehículo sospechoso. La policía dijo que se pueden presentar cargos adicionales en espera de una mayor investigación.
Más de 50 policías del Capitolio y policías metropolitanos resultaron heridos durante el ataque del miércoles, y varios han sido hospitalizados con “heridas graves”, según Sund.
“El violento ataque al Capitolio de Estados Unidos no se parece a ninguno que haya experimentado en mis 30 años en la aplicación de la ley aquí en Washington, D.C.”, dijo Sund. “Mantener la seguridad pública en un entorno abierto, específicamente para las actividades de la Primera Enmienda, ha sido un desafío durante mucho tiempo“.
Los legisladores dicen que están perplejos por la falta de preparación entre las fuerzas del orden, dado que se sabía desde hace semanas que el presidente Donald Trump estaba promoviendo una manifestación que, según dijo, tenía como objetivo evitar la certificación de la victoria de Joe Biden.
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El representante Mike Quigley, un demócrata de Illinois que estuvo encerrado en la cámara de la Cámara durante un enfrentamiento armado entre la policía del Capitolio y un alborotador, elogió a los oficiales que estaban en el edificio y que arriesgaron sus vidas para proteger a los legisladores. Pero Quigley dejó en claro que estaban superados en número y que la policía estaba mal preparada.
“La policía del Capitolio con la que estaba cerca hizo un trabajo increíble en circunstancias difíciles“, dijo Quigley a CNN. “Mi preocupación no era cuán valiente era la Policía del Capitolio. Fue que una hora antes de que comenzara el debate, miré a la multitud de personas que rodeaban las diferentes secciones del Capitolio y dije, no tenemos suficiente seguridad”.
Quigley agregó: “No soy un experto en seguridad, pero se puede decir que nos superaron en personal una hora antes del debate“, refiriéndose a los procedimientos del Congreso para certificar la victoria de Biden.
Otros que estaban en la cámara de la Cámara con Quigley también describieron la desgarradora escena. Después de que un alborotador rompió una ventana de la puerta para entrar a la cámara, varios policías del Capitolio sacaron sus armas y advirtieron al individuo que retrocediera. Se había colocado un escritorio y sillas para bloquear la entrada del alborotador, pero los legisladores no tenían forma de saber si la persona estaba armada o tenía artefactos explosivos que pudieran convertir la escena en mortal.
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“Fue lo más cerca que estuve de pensar que existe la posibilidad de que pueda morir“, dijo el representante Raúl Ruiz, un demócrata de California. “Todo lo que escuchamos fue el movimiento y la intensidad. En cualquier momento, alguien podría haber entrado corriendo por la puerta con una semiautomática”.
Inmediatamente cuando hubo una violación de seguridad, los principales líderes, incluida Pelosi, fueron evacuados. Luego, los legisladores de la Cámara que estaban en el nivel inferior fueron evacuados. Pero había 11 demócratas que estaban sentados en el nivel superior de la cámara.
“Fue una de esas situaciones en las que estás en esa situación, ¿cuál sería tu oración?” Dijo Ruiz. “Y recé. Fue uno de esos momentos en los que dije: ‘Si me vas a llevar a casa, llévame a casa’“.
Las actividades están enmarcadas en el lema "Salgamos a jugar", por lo que el énfasis estará en los juegos tradicionales y la "transmisión intergeneracional de la riqueza cultural". La jornada se realizará en 16 regiones del país.
