Mediante una declaración oficial del Palacio de Buckingham, la familia real indicó que abordarán en privado los temas acusados por la pareja, asegurando que "los problemas planteados, en particular el de raza, son preocupantes". Además, indicaron que "Harry, Meghan y Archie siempre serán miembros de la familia muy queridos".
(CNN) – El Palacio de Buckingham rompió su silencio el martes por la noche sobre la explosiva entrevista de Harry y Meghan con Oprah Winfrey, y dijo en un comunicado en nombre de la Reina Isabel II que las acusaciones de racismo hechas por los Sussex eran preocupantes y “tomadas muy en serio”.
“Toda la familia está entristecida al conocer el alcance total de lo desafiantes que han sido los últimos años para Harry y Meghan”, se lee en el comunicado.
“Los problemas planteados, en particular el de raza, son preocupantes. Si bien algunos recuerdos pueden variar, se toman muy en serio y la familia los abordará en privado”.
La declaración agrega: “Harry, Meghan y Archie siempre serán miembros de la familia muy queridos”.
La respuesta del Palacio de Buckingham se produce más de 36 horas después de que el duque y la duquesa de Sussex hicieran una serie de acusaciones condenatorias en su primera entrevista desde que dejaron la vida como miembros de la realeza y se mudaron a Estados Unidos el año pasado.
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La entrevista sumió a la casa real en una crisis. Algunas de las afirmaciones, incluidas las acusaciones de racismo y la admisión de Meghan de que se sintió suicida durante su primer embarazo, tienen el potencial de afectar profundamente la reputación de la familia real y han dejado una nube de sospecha sobre algunos de sus miembros.
La familia esperó para responder hasta que la entrevista se emitió en el Reino Unido, para permitir que los espectadores del país la vieran primero, dijo una fuente real a CNN.
La fuente agregó que era importante para el Palacio de Buckingham considerar cuidadosamente su respuesta antes de emitir el comunicado.
Durante la entrevista, Harry y Meghan mencionaron la falta de apoyo por la cobertura de la prensa invasiva y la decisión de la institución real de no darle un título a su hijo Archie, y con ello su elegibilidad para la protección, como base para su decisión de mudarse del Reino Unido.
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La fuente real le dijo a CNN que en el centro de un asunto estaba la familia, a la que se le debería dar la oportunidad de abordar estos problemas en privado.
La fuente también sugirió que una conversación entre la familia real y Meghan y Harry debería haber tenido lugar en privado para abordar los problemas planteados por la pareja en lugar de en una entrevista transmitida.
La diversidad, la igualdad, la inclusión y la salud mental son temas importantes y destacan que ha formado parte del trabajo de los miembros de la familia durante muchos años, agregó la fuente.
El príncipe Carlos apareció en público el martes por primera vez desde la entrevista sísmica y no respondió a una pregunta sobre el furor que rodeaba a su familia.
“Señor, ¿qué le pareció la entrevista?” le preguntó un periodista fuera de cámara al padre de Harry y al heredero al trono británico, mientras visitaba un centro de vacunación COVID-19 en Londres.
Harry le dijo a Winfrey que su padre había dejado de atender sus llamadas brevemente después de que la pareja anunció que se alejaban de la familia real en enero pasado.
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Sin embargo, el duque agregó que reparar la relación a tiempo será “una de mis prioridades”.
También sugirió que su relación con su hermano, el príncipe William, se había visto afectada y dijo que “la relación es espacial, en este momento”.
Harry y Meghan también hablaron sobre su nueva vida en California con Winfrey. La pareja espera su segundo hijo, una niña, este verano.