El presidente de Estados Unidos declaró ante la audiencia de televisión que hay una crisis en la frontera sur del país, y que un muro es el mejor y el único remedio.
El presidente Donald Trump declaró ante la audiencia de televisión estadounidense el martes que hay una crisis en la frontera sur de EE.UU. y que un muro es el mejor y el único remedio.
Después de semanas de un cierre parcial del gobierno, Trump y sus negociadores han avanzado poco para convencer a los demócratas de que se necesita una barrera antes de que las agencias puedan reabrir y los trabajadores federales puedan comenzar a recibir cheques nuevamente.
Trump dijo que el tema de inmigración es “una crisis del corazón, una crisis del alma”.
“Todos los estadounidenses sufren por la inmigración ilegal sin control”, dijo.
El mandatario aseguró que “el Gobierno permanece cerrado por una razón y solo una: los demócratas no quieren financiar la seguridad fronteriza”.
“El Gobierno Federal se mantiene cerrado porque los demócratas no apoyan la financiación de la seguridad fronteriza. Pero la única solución es que los demócratas aprueben una ley de gastos que defienda nuestras fronteras y reabra este Gobierno. Esta situación podría solucionarse en una reunión de 45 minutos”, dijo en su primer mensaje a la Nación desde la Oficina Oval en la Casa Blanca.
Trump también anunció que el muro sería “de acero y no de hormigón” y que “se pagaría rápidamente a sí mismo”, además de que estaría parcialmente financiado por el acuerdo comercial con México.
Trump no declaró la emergencia nacional durante su discurso, algo que se especulaba que podría hacer como medida para financiar el muro.
“Trump hizo el discurso habitual, que es el del miedo. Dijo que por la frontera sur ‘se están filtrando millones de asesinos, entra droga y cada día mueren cientos de americanos producto de inmigrantes ilegales que no deberían estar en el país’ (…) Está utilizando esto como excusa para desviar el proceso democrático”, comentó el analista internacional Raúl Sohr.
Además, el periodista explicó que según las últimas encuestas, el 51% de los estadounidenses culpan a Trump por el cierre de gobierno, mientras que solo un 30% culpa a los demócratas.
Trump culpa a los demócratas del cierre
Trump asumió la responsabilidad de un cierre parcial del Gobierno -que va en 18 días- contra los demócratas, y dijo que el asunto podría resolverse fácilmente si sus oponentes políticos ceden a sus demandas sobre el financiamiento de la frontera.
Los demócratas han expresado su apoyo a los pasos de seguridad fronteriza como la tecnología mejorada, pero se han negado a brindar apoyo para un muro fronterizo.
Trump dijo que reanudará las conversaciones con los demócratas el miércoles.
“Esta situación podría resolverse en una reunión de 45 minutos”, dijo. “Mañana he invitado a la dirección del Congreso a la Casa Blanca para que esto se haga“.
Trump afirmó que todos los estadounidenses sufren por la inmigración ilegal no controlada. Los expertos no están tan seguros
El presidente Trump dijo: “Todos los estadounidenses se ven perjudicados por la inmigración ilegal no controlada”.
Es muy difícil saber exactamente cuánto le cuestan a Estados Unidos los inmigrantes indocumentados. Muchos expertos rechazan la idea de que los inmigrantes indocumentados son una tensión para la economía. Un análisis de 2017 observó que los inmigrantes indocumentados “hacen contribuciones fiscales considerables”, por ejemplo.
De manera similar, un estudio realizado en 2018 por el libertario Cato Institute, que revisó los datos de condenas penales del Departamento de Seguridad Pública de Texas, encontró que los inmigrantes, legales o ilegales, son menos propensos que los estadounidenses nativos a ser condenados por un delito. Según el FBI, en todo el país también hay una disminución general en el número de delitos violentos.
Trump afirmó que su nuevo acuerdo comercial pagará por el muro, a pesar de la falta de asignaciones de esos ingresos
Trump afirmó: “El muro también será pagado indirectamente por el nuevo gran acuerdo comercial que hemos hecho con México“.
Incluso si el Acuerdo Comercial de Estados Unidos con México termina generando ingresos fiscales, no hay nada que destine ese dinero a un muro. Los ingresos y los impuestos corporativos son ingresos generales que deberían ser asignados por el Congreso.
Otra forma en que el comercio podría traer dinero al Tesoro es a través de aranceles, que pagan los importadores estadounidenses cuando compran productos extranjeros. Pero al igual que el Tratado de Libre Comercio de América del Norte, el nuevo acuerdo apunta a mantener el comercio entre los tres países en gran parte libre de aranceles.
Trump destaca la violencia que enfrentan los migrantes en tránsito hacia Estados Unidos
Trump reconoció la violencia que enfrentan los migrantes en tránsito a Estados Unidos durante su discurso cuando dijo: “Una de cada tres mujeres son agredidas sexualmente en el peligroso viaje a través de México. Las mujeres y los niños son las víctimas más grandes de nuestro sistema roto. Esto es La trágica realidad de la inmigración ilegal en nuestra frontera sur”.
En efecto, hay reportes de que el viaje a la frontera de EE. UU. y México es violento.
Según datos de Médicos Sin Fronteras, el 68,3 % de los migrantes y refugiados “que ingresaron a México informaron ser víctimas de violencia durante su tránsito hacia los Estados Unidos”, y casi un tercio de las mujeres dijeron que habían sido víctimas de abuso sexual.
Pero algo de contexto: esta misma violencia es la razón por la cual las mujeres eligen viajar en caravanas, para lograr seguridad. Trump no ha ofrecido detalles sobre cómo sus políticas abordarían el flagelo de la violencia sexual que enfrentan los migrantes.
La administración ha argumentado en el pasado que al construir el muro, se impedirá que los migrantes realicen el viaje.
El objetivo de Trump
La administración se ha negado rotundamente a tomar medidas para restaurar el financiamiento de algunas agencias, creyendo que el cierre es su mejor apalancamiento para asegurar los fondos del muro fronterizo. Ante el temor de perder una batalla de mensajes a medida que más estadounidenses sienten el dolor de un Gobierno cerrado, Trump intensifica sus advertencias de que el país no es seguro sin el muro que prometió como candidato.
Al presentar su argumento, Trump está recurriendo por primera vez a uno de los símbolos más reconocibles de la presidencia de Estados Unidos: un discurso nocturno de ocho minutos directo a la cámara desde la Oficina Oval. Continuará su empuje en los días siguientes, reuniéndose con los senadores republicanos durante su almuerzo semanal el miércoles. El jueves visitará la ciudad fronteriza de McAllen, en Texas.
Trump, sin embargo, carece de credibilidad pues él y sus funcionarios hayan repetido varias afirmaciones falsas sobre la inmigración.
La respuesta de los demócratas
El líder de la minoría en el Senado, Chuck Schumer, hablando unos momentos después del discurso en horario de máxima audiencia del presidente Trump, dijo que la solución para el cierre es obvia: “Separe el cierre del Gobierno de los argumentos sobre la seguridad fronteriza“.
“Hay una legislación bipartidista, apoyada por demócratas y republicanos, para reabrir el Gobierno y permitir que continúe el debate sobre la seguridad fronteriza. No hay excusa para herir a millones de estadounidenses por una diferencia política“, dijo, hablando junto a la presidenta de la Cámara de Representantes Nancy Pelosi.
Continuó diciendo que ningún presidente debería exigir que “se salga con la suya o, de lo contrario, el Gobierno se cierra”.
“No gobernamos por una rabieta”, dijo Schumer.
Pelosi agregó: “El presidente Trump debe dejar de mantener como rehén al pueblo estadounidense, debe dejar de fabricar una crisis y debe volver a abrir el gobierno”.