La compañía detalla que recibió 5.981 informes de agresión sexual en 2017 y 2018. A raíz de este reporte, otras aplicaciones de transporte han tomado acciones de seguridad en el país norteamericano.
Este jueves Uber publicó un informe de seguridad en Estados Unidos que revela, entre otros detalles, que recibió 5.981 informes de agresión sexual en 2017 y 2018. Entre ellos, hubo 464 reportes de violación.
El texto, que se produce más de un año después de una investigación de CNN sobre agresión sexual y abuso en el servicio de transporte, también indica que hubo 19 muertes causadas por agresión física durante 2017 y 2018.
Asímismo, incluyó información sobre la parte denunciante y la parte acusada, y los pasajeros acusados representan el 45% de las partes acusadas de incidentes de agresión sexual. “Los conductores tienen derecho a que se cuenten sus experiencias y tenemos la responsabilidad de apoyarlos”, indican.
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Aproximadamente, 92% de las víctimas de violación eran pasajeros y 7% de las víctimas eran conductores. Las mujeres y las personas que se identifican como mujeres constituyeron el 89% de las víctimas, y los hombres y personas que se identifican como hombres representaron aproximadamente el 8% de las víctimas. Menos del 1% de las víctimas fueron identificadas como minorías de género.
Las otras cuatro categorías de agresión sexual definidas por Uber, que incluyen besos no consentidos, toques no consentidos e intentos de violación, no detallan si las partes denunciantes fueron víctimas.
La empresa se comprometió a publicar el informe hace casi un año en respuesta a una investigación de CNN que encontró que al menos 103 conductores de Uber en Estados Unidos habían sido acusados de agredir sexualmente o abusar de sus pasajeros en los últimos cuatro años.
Los conductores fueron arrestados, buscados por la policía o identificados en demandas civiles relacionadas con los incidentes. Era la primera vez que se ponían números al problema.
Los ejecutivos de la aplicación de transporte anunció mayores medidas de seguridad en 2018, incluida una alianza con RapidSOS, una compañía que envía la ubicación del conductor y la información relevante a una agencia de policía local cuando el piloto usa el botón de emergencia en la aplicación.
Además, la app renovó su política de verificación de antecedentes para realizar verificaciones anuales de los conductores y que eliminaría una política que obligaba a las personas con quejas de agresión sexual a someterse a arbitraje y les hacía firmar acuerdos de confidencialidad.
Uber se hizo empresa pública en mayo, pero advirtió a los inversores en su documentación de salida a bolsa sobre el informe, que según dijo podría afectar negativamente a su marca.
“Las respuestas públicas a este informe de transparencia o informes públicos similares de incidentes de seguridad que supuestamente ocurrieron en nuestra plataforma… pueden resultar en una cobertura negativa de los medios y un mayor escrutinio regulatorio y podrían afectar negativamente nuestra reputación con los usuarios de la plataforma”, dice la compañía en la presentación.
Uber y su competidor Lyft se han enfrentado a acciones legales relacionadas con problemas de seguridad en todo el país norteamericano. La falta de transparencia sobre el número de incidentes relacionados con los conductores ha sido un punto de conflicto en las demandas contra la empresa. Lyft también ha dicho que publicará un informe de seguridad a finales de año.
Didi Chuxing, la empresa de transporte de pasajeros más grande de China, también se ha enfrentado problemas de seguridad de los pasajeros y la reacción violenta por el manejo de incidentes, incluidos los asesinatos de dos pasajeras en 2018.
En noviembre, la compañía anunció que reanudaría el servicio en su servicio de viaje compartido Hitch con un “toque de queda” a las 20 horas para las mujeres, que rápidamente echó para atrás luego de enfrentar críticas.