El alcalde de Renca analiza cómo la pandemia afectó el aprendizaje de lectorescritura de cientos de estudiantes a lo largo de los colegios de Chile y las medidas que su municipalidad ha tomado para enfrentar este déficit, entre las que destaca un festival de lectura que se llevará a cabo este viernes y sábado. "El objetivo es simple, pero ambicioso (...), lograr que todos los estudiantes de la comuna pasen a 2º básico con un nivel de lectoescritura suficiente", detalla.
Uno de los orgullos más grandes de nuestro país es ser considerado tierra de poetas. Y la verdad es que, en este caso y sin pecar de falta de humildad, podemos afirmar que dicha denominación no es ninguna exageración. Como todos sabemos, contamos con dos Premios Nobel de literatura, Gabriela Mistral en 1945 y Pablo Neruda en 1971. Sin embargo, además de estos gigantes, el catálogo es muchísimo más extenso. Nuestra historia se nutre de innumerables otros autores y autoras que a través de las letras nos han presentado mundos, personajes e historias que han posibilitado la construcción de una rica identidad nacional en torno a la literatura y la poesía.
Dicha identidad no se sostiene por sí sola, debe ser cuidada y fomentada. De lo contrario, ese tremendo capital cultural nacional puede empezar a perderse y corremos el riesgo de transformar la fructífera literatura nacional en unos “años de oro” que recordaremos con nostalgia. Lamentablemente, creo que si no actuamos a tiempo, este desolador panorama podría hacerse realidad.
Tras los resultados SIMCE 2022 no queda espacio para dudas ni especulaciones: la pandemia y los más de 250 días de escuelas cerradas provocaron un retroceso en los procesos formativos de los niños, niñas y adolescentes de Chile. En lectura, los resultados son sumamente preocupantes: en cuarto básico un 32% de los alumnos tiene un nivel insuficiente, y en segundo medio ese porcentaje alcanzó un 53%. Además, a nivel local estas cifras se condicen con el diagnóstico comunal de lectoescritura que llevamos a cabo en Renca. Sin rodeos, podemos afirmar que cerca de la mitad de los estudiantes de Chile no está aprendiendo a leer de manera suficiente.
Alertados por este escenario es que transformamos el fomento de la lectura en una prioridad de nuestra gestión municipal, condensando diversos esfuerzos a través del programa Renca Lee. El objetivo de este programa es simple, pero ambicioso: lograr que todos los estudiantes de la comuna pasen a 2º básico con un nivel de lectoescritura suficiente. Para esto, hemos desplegado diversas acciones estratégicas. En primera instancia, decidimos fortalecer la biblioteca comunal y las bibliotecas escolares, entendiendo que es necesario contar con infraestructura y material didáctico para poder enseñar el hábito de la lectura. Además, hemos impulsado los grupos de lectura y las visitas de cuentacuentos en nuestros eventos, buscando aproximaciones más lúdicas al mundo de las letras. También, hemos hecho un esfuerzo por hacer llegar más libros a las casas de la comuna, integrándolos como regalos de navidad, que esperamos introduzcan a más niños y niñas a la lectura. Además, repartimos una copia de la revista Guarisapo, especializada en el desarrollo de la lectura en familia, a cada uno de los 1700 estudiantes de 1º básico de todos los colegios de la comuna, tanto públicos como privados, en base al principio de universalización.
Es en este contexto que, en Renca, nos estamos preparando para una experiencia llena de imaginación y fantasía. Este viernes y sábado tendremos el primer Festival del Libro y la Niñez, espacio que busca mostrarle a los vecinos y vecinas el lado más entretenido y emocionante de la lectura. Este festival contará con la presencia de 13 editoriales nacionales e internacionales, teatro, danza, circo y música en vivo en pleno centro cívico, nuestra Plaza Mayor. Además, gracias a la presencia de Japón como nuestro país invitado, esperamos aprender y vivir una experiencia intercultural sumamente enriquecedora para la comunidad de Renca.
Superar la crisis de la educación, con especial énfasis en la lectura, no puede limitarse al esfuerzo y la capacidad de las escuelas y las familias. Ante un problema de escala nacional tenemos que responder desde el Estado, involucrando al máximo a la comunidad. Es por eso que, desde la Municipalidad de Renca, estamos empujando un cambio cultural: llevando libros a las casas y sacando los libros a las plazas. Se trata de usar el espacio público para hacerlo escenario de un encuentro cultural mágico, al cual todos y todas están invitados.