Mientras continúa la crisis que afecta al emblemático establecimiento, la Comisión de Educación dio a conocer un catastro de los problemas que afectan al recinto. Entre los detalles se destaca que los pupitres de los alumnos son los mismos que se usaban en la década del 60.
Una nueva jornada de incidentes en el Instituto Nacional (IN) marcó este lunes, que terminó nuevamente con la suspensión de clases luego que se registraran enfrentamiento entre estudiantes y personal de Fuerzas Especiales de Carabineros.
Aunque las autoridades descartaron el cierre anticipado del año académico, se están evaluando una serie de medidas para aumentar la seguridad del recinto y evitar nuevos desmanes.
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En paralelo, la Comisión de Educación de la Cámara de Diputados despachó un detallado catastro que se hizo luego de la visita que los parlamentarios realizaron el pasado 8 de julio al IN.
“En el informe se hace una serie de recomendaciones sobre las contrataciones de profesores, para reemplazos ante las faltas que se nos relató. En cuanto a la infraestructura, el colegio no ha tenido una inversión integral básicamente desde su construcción“, destalla la presidenta de la comisión, la diputada Camila Rojas (Comunes).
Como ejemplo de los problemas de infraestructura del colegio, la parlamentaria aseguró a Las Últimas Noticias que “los pupitres donde se sentaban los estudiantes de los 60 son los mismos pupitres que utilizan los alumnos de 2019”.
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“Los pupitres y los asientos individuales se encuentran fijos, lo que impide cambiar la distribución de estos y, por tanto, dificulta el trabajo grupal. También se observa la incomodidad de estos asientos de madera que al no tener acolchado, que consta en el n°19 del acta de la sesión del 6 de agosto, genera incomodidad y dolor”, se indica en el informe.
Se destaca evidencia además el estado de abandono del liceo emblemático: las aulas tienen “ventanales rotos; paredes rayadas; pizarras obsoletas; puertas que no cierran y ausencia de muebles”.
El documento también detecta las precarias condiciones sanitarias del recinto: “En el caso de los baños, resulta evidente que la cantidad es insuficiente para el número de estudiantes del establecimiento que, según cálculos de la comunidad, corresponde a 2 inodoros por cada 60 estudiantes”.
“De marzo a la fecha, el colegio no cuenta con agua caliente, así como tampoco calefacción en las salas durante el invierno, ni sistema de aire acondicionado en el verano”, agrega el texto.
Por último, el matutino recoge otro de los puntos críticos detectados en el informe, que tiene relación con la salud mental del alumnado: “Se han detectado 92 casos de estudiantes con problemas de salud mental, entre los que se cuenta depresión, ansiedad y crisis de pánico”.