La observadora permanente de España ante la Organización de los Estados Americanos (OEA), Carmen Montón, entregó este martes en Washington a su homólogo chileno una serie de documentos desclasificados relativos al golpe militar que acabó con el gobierno de Salvador Allende.
(EFE) – El Gobierno de España decidió desclasificar una serie de documentos relativos al golpe de Estado en Chile de 1973, en un intento de “recuperar la memoria democrática”, cuando se cumple medio siglo de uno de los sucesos más graves en la historia del país latinoamericano.
La observadora permanente de España ante la Organización de los Estados Americanos (OEA), Carmen Montón, entregó este martes en Washington a su homólogo chileno una serie de documentos desclasificados relativos al golpe militar que acabó con el gobierno de Salvador Allende.
“El gobierno de España ha querido hacer un gesto especial para la conmemoración de los 50 años del golpe de Estado de 1973 en Chile, y desclasificar documentación relativa como contribución a recuperar la memoria democrática“, afirmó Montón en un mensaje publicado en X, antes Twitter.
El mensaje está acompañado de una fotografía en la que aparecen Montón y el representante permanente de Chile ante la OEA, Sebastián Kraljevich, recibiendo el sobre.
La observadora añadió en Instagram que a partir de ahora se podrán analizar y estudiar “muchos” documentos sobre el golpe y las relaciones de Chile con la OEA correspondientes a 1972, 1973 y 1974.
Montón hizo una referencia especial al despacho número 496, del 26 de septiembre de 1973, sobre la despedida en la OEA del exembajador de Chile, Luis Herrera.
Herrera, según recalcó la observadora, “se despedía dejando unas palabras que se quedan clavadas en el alma, por su profundidad y carga moral”.
“La historia dirá si los planteamientos fueron justos o equivocados, pero nos vamos con la conciencia limpia, creíamos en una unidad espiritual del continente latinoamericano y luchamos por lograrla”, apuntaba el exembajador.
Montón afirmó que aunque la conmemoración del golpe y de la muerte de Allende está “cargada de dramatismo”, también está llena de esperanza.
“De esperanza ante la profética certeza de que mucho más temprano que tarde, como diría Allende en su último discurso, se abrirían las grandes alamedas por donde caminara el hombre libre ( añado yo, también la mujer libre) para construir una sociedad mejor”, dijo.
La figura de Allende, en su opinión, es aún hoy en día “una fuente de inspiración para las fuerzas políticas progresistas que defienden la justicia social, el crecimiento económico sostenible y la democracia”.
Justo este martes la OEA homenajeó al expresidente chileno y acordó bautizar con su nombre la puerta principal del edificio de su secretaría general.
Para ello aprobó una resolución en la que resolvió otorgar a Allende (1908-1973) un reconocimiento “en los mismos términos que se han aplicado a las figuras históricas del hemisferio que son honradas en la sede de la organización”, y decidió por ello “designar con el nombre de Presidente Salvador Allende Gossens” la puerta principal de su sede.
Kraljevich destacó en la sesión que el golpe y la posterior dictadura liderada por Augusto Pinochet impactaron “severamente en todo el hemisferio, con consecuencias que siguen presentes hasta hoy en los más variados ámbitos de la vida social, desde la política y la economía a la cultura y los derechos humanos”.
“Ocho de cada diez familias de desaparecidos todavía siguen buscándolos. Está también presente en los desafíos y turbulencias que enfrentan nuestras democracias imperfectas, donde miradas autocráticas las tensionan cada día”, dijo.