Ángela Vivanco considera que ha sido “herida y maltratada” y ve probable su remoción de la Suprema

Por Polet Herrera

03.10.2024 / 21:58

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En medio de su suspensión, la ministra abordó cómo ha enfrentado los cuestionamientos por su vínculo con Luis Hermosilla durante su proceso de postulación en la Suprema y el panorama respecto a su posible remoción.


“Yo no me siento tratada equitativamente; Creo que he sido maltratada y me estoy defendiendo con muchas dificultades”, expresó Ángela Vivanco.

Actualmente, la ministra se encuentra suspendida de sus funciones en la Corte Suprema y enfrenta una causa administrativa y penal. Se decretó la apertura de un cuaderno de remoción en su contra tras revelarse los chats que tenía con el abogado Luis Hermosilla, principal imputado en el denominado Caso Audios.

“Me estoy defendiendo con muchas dificultades, y mis abogados se han encontrado con una gran cantidad de puertas cerradas; cada vez que han pedido algo, es un no”, afirmó a La Tercera.

En esa misma línea, argumentó que se ha filtrado información de la Comisión de Ética, por lo que ha llamado la atención la “poca objetividad”. A esto se suman los “famosos cargos adicionales que tienen que ver con denuncias de relatores de los que yo nunca tuve noticia y que se me agregan no solo a la Comisión de Ética, sino también al procedimiento de remoción”.

Desde su visión, esto podría tener relación con una cierta resistencia a lo diferente. No obstante, en lo emocional, comentó que está comprometida con su defensa, “porque creo que no solo un ministro de la Corte Suprema, sino que cualquier persona no se le puede considerar culpable de nada, mientras no tenga la posibilidad de defenderse y de respondedor”. “Yo siento que no he tenido igualdad de armas, que ha habido un apuro muy intenso en hacer una remoción exprés”, agregó.

Consultada sobre la remoción, aseveró que realizará sus descargos si tiene esa opción, pero es consciente de que el panorama es “malo y oscuro”. Al preguntarle si avanzará la remoción, respondió: “Es altamente posible, pero como digo, me estoy defendiendo, pensando en que prime finalmente un análisis objetivo”.

El vínculo con Hermosilla

Ángela Vivanco trabajó durante varios años con el abogado Juan Pablo Hermosilla y, cuando comenzó su proceso de postulación en el máximo tribunal, demostró que, al ser externa y no tener vinculación política, “yo estaba bastante desinformada de cómo iba avanzando el tema de mi postulación”.

“Entonces, una persona me sugiere y me dice: ‘Mira, yo creo que tú deberías hablar con Luis Hermosilla, que es una persona cercana al gobierno y que creo que te puede mantener informada de si avanza tu candidatura o no’, porque en ese periodo que uno está como a la espera, tiene que tener mucho cuidado de qué causas toma, en qué trabaja, qué es lo que dice, etcétera. Entonces, empieza a afectarte incluso en cómo te sostienes económicamente”, argumentó.

En ese período, reveló que debió pedir dinero prestado a sus familiares. Respecto a si era un conducto informal  recurrir al abogado, desde su perspectiva subrayó: “El Ministerio de Justicia no daba información. Yo no le fui a pedir que me consiguiera votos. Yo le dije que me ayudara a saber cómo avanzaba lo mío, porque a mí me faltaba información. Y en eso me ayudó, porque me iba contando; yo le iba contando a él qué reuniones tenía, y él no me consiguió reuniones, ni me comprometió con parlamentarios; las reuniones las conseguí directamente yo”.

Vivanco recuerda que tuvo una buena compañía de él en ese proceso y eso “yo se lo agradecí, porque en estos casos uno tiene que tener una cierta conversación con alguien que le vaya contando cómo avanzan los temas”.

Actualmente, Vivanco comentó que la situación de Hermosilla es compleja y que ha implicado también a quienes tengan mensajes o relaciones con él, que se encuentran en un “manto de duda”.

“Si yo lo pienso hoy día y me digo que debí haber mandado WhatsApp con Hermosilla, por supuesto que no, pensándolo con la idea de hoy o sabiendo que era una persona que guardaba conversaciones que eran entre dos personas y que tenían carácter privado, que te iban a terminar exponiendo, por supuesto que no lo hubiera hecho. Yo hago el mea culpa de los temas de la prudencia, pero la prudencia también se mide de acuerdo a lo que se puede prever del futuro. No ahora decir que nadie debería haberse vinculado con el señor Hermosilla es muy fácil”, expuso.

¿Usted le entregó información que no debía? ¿Adelantó algún tipo de relación judicial de alguna manera al abogado Luis Hermosilla?
—En absoluto.
¿Y al revés, él le pidió algún tipo de conducta impropia en función de su cargo como Suprema?
—A la segunda sala fui escasísimas veces y no creo haber visto ninguna causa del señor Hermosilla y cuando fui, por el sistema de integración de las causas, así que la verdad es que yo no siento que las conversaciones que tuve con el señor Hermosilla comprometieran mi trabajo jurisdiccional.

Finalmente, concluyó que actualmente se siente bastante desconectada de la Corte Suprema: “Me siento muy herida; he sufrido mucho todo el trato que he tenido, pero me sentiré adentro mientras esté haciendo mi defensa”.