¡Cómo duelen los carabineros que han sido cobardemente asesinados!: Arzobispo Chomalí por crisis de seguridad

Por Polet Herrera

18.09.2024 / 12:35

En el Te Deum Ecuménico, el arzobispo de Santiago, Fernando Chomalí, abordó los crímenes cometidos contra funcionarios policiales y destacó el trabajo que realizan los gendarmes en los recintos penitenciarios.


En el marco del Te Deum Ecuménico, en la homilía encabezada por el arzobispo de Santiago, Fernando Chomalí, se abordaron diversos temas de la contingencia política y nacional, entre ellos la crisis de seguridad y los crímenes registrados contra Carabineros.

En ese contexto, Chomalí agradeció a las Fuerzas Armadas que protegen las fronteras y a las Fuerzas de Orden y Seguridad que se encuentran vigilantes para que la población pueda vivir tranquila. “Y precisamente por esa misma esperanza que nos entregan: ¡Cómo duelen los carabineros que han sido cobardemente asesinados! ¡Cómo duelen!”, expresó.

En esa misma línea, se refirió a los funcionarios de Gendarmería: “En medio de la adversidad, pero con mucho empeño, buscan reinsertar a la vida en sociedad a quienes han delinquido”.

“Duele el alma ver cómo cierran industrias”

Por otro lado, Chomalí abordó el panorama económico y laboral, en medio del cierre de operaciones de la Siderúrgica Huachipato en la comuna de Talcahuano, Región del Biobío.

“Duele el alma ver cómo se cierran industrias y, con ello, los sueños de tantos. Duele el alma ver cómo son tratados los micro y pequeños empresarios que quedan lanzados a su propia suerte y en la más absoluta indefensión frente a un sistema económico que gira en torno a la competencia, al consumo y al lucro, que claramente no los ayuda”, planteó.

Asimismo, abordó el tema de la informalidad y la situación del comercio ambulante ilegal.

Familia y crisis de natalidad

Finalmente, se refirió al descenso de la natalidad en el país, instando a que “en la familia hay una fuente de alegría y de felicidad que los jóvenes valoran y necesitan, pero que muchas veces no encuentran”.

Por tanto, Chomalí subrayó que tanto el Gobierno como los legisladores tienen una gran responsabilidad en esta materia, comentando: “¡Será difícil aumentar la natalidad con jóvenes sin oportunidades en su camino!”.

Para concluir, el arzobispo Chomalí reflexionó: “Siempre, cuando el bien de las personas se vea amenazado, alzaremos la voz por todos aquellos que no tienen voz. Desde los niños no deseados en el vientre de sus madres hasta los ancianos descartados que dan su último respiro”.