En los próximos meses, la entidad espera conectar al sistema cerca de 500 MW de capacidad renovable adicional a los 221 MW solares que han entrado en operación comercial entre agosto y septiembre. Desde la ACSP cuestionan el cierre: “Reemplazar carbón por diésel no apunta a tener una matriz energética más limpia”.
Este viernes, Enel Chile desconectó de manera definitiva la Unidad 2 del Complejo Termoeléctrico Central Bocamina de Coronel, en la Región del Biobío, la última de las dos divisiones de la planta termoeléctrica.
Con ello, la compañía se transformó en la primera del sector eléctrico en dejar de utilizar carbón en sus operaciones de generación. Esto además ocurre 18 años antes de lo comprometido en Acuerdo Nacional de Descarbonización de 2019.
Desde la empresa destacan el objetivo de descarbonizar su matriz de generación e impulsar el desarrollo de una amplia cartera de proyectos renovables, que considera centrales eólicas, geotérmicas, solares, hidráulicas y unidades de baterías.
“Nos propusimos liderar la transición energética en el país y hoy damos un paso más en este camino, convirtiéndonos en la primera empresa del sector energético nacional en dejar de utilizar carbón en sus operaciones de generación. En paralelo en las últimas semanas hemos iniciado la operación comercial de dos plantas renovables: Azabache (60.9 MW) y Sol de Lila (161 MW) y en los próximos meses esperamos conectar unos 500 MW de capacidad renovable, duplicando así la potencia de Bocamina II (350 MW)”, dijo Fabrizio Barderi, gerente general de Enel Chile.
En la entidad también señalan que cada uno de los 56 colaboradores directos de Enel que, hasta hoy, cumplían labores en la operación de la Unidad 2 de Central Bocamina accedieron a otras oportunidades laborales al interior de la Compañía u optaron por programas de reinserción en otros proyectos profesionales, al igual que lo ocurrido tras el cierre y desconexión total de la Unidad 1 del complejo Bocamina y de la unidad de carbón de Central Tarapacá.
Tras la desconexión de la Unidad 2 de Central Bocamina, también se deja de utilizar el vertedero de cenizas del complejo. El sitio de aproximadamente 10 hectáreas, desde 2019 ha sido objeto de un ambicioso proyecto de revegetación por diseño, una solución basada en la naturaleza, único a nivel nacional y que lo está transformando en un bosque nativo vivo dentro de Coronel.
En relación con el futuro de las instalaciones, se están evaluando diversas alternativas de reutilización de los activos con el fin de dar una nueva vida y oportunidades de desarrollo para esa zona.
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ACSP: “Reemplazar carbón por diésel no apunta a tener una matriz energética más limpia”
Para la Asociación de Concentración Solar de Potencia (ACSP), la desconexión de la división es un logro en el proceso de descarbonización, sin embargo, aseguran que dejar atrás el carbón no significa necesariamente avanzar en la adopción de energías más limpias, tras el informe del Coordinador Eléctrico en que se indica que la central en cuestión deberá ser alimentada por generación local adicional (diésel), durante las horas de mayores demandas.
“Cuando nos enteramos de que Central Bocamina II se cerraría, tras tan sólo 10 años de funcionamiento, pensamos que era una excelente señal de la intención real de dejar atrás combustibles fósiles en la generación de energía. Pero ahora se informa que la ciudad de Concepción requerirá diésel para poder responder a la demanda y eso es lo opuesto a avanzar en una matriz energética limpia”, aseguró Cristián Sepúlveda, gerente de la ACSP.
“Reemplazar carbón por diésel no apunta a tener una matriz energética más limpia”, agregó.
El directivo reconoce que las energías renovables como la fotovoltaicas o eólica, necesitan contar con alternativas de almacenamiento de larga duración, ya que el sistema requiere estabilidad, ahí es que la Concentración Solar de Potencia se transforma en una alternativa eficiente, ya que “tiene grandes atributos para la generación eléctrica de Chile, por ejemplo, una planta de este tipo puede funcionar 24 horas al día, siete días a la semana. Es una tecnología dos por uno, almacena para generar luego”.
Desde la ACSP indicaron que en la última licitación, aun cuando se entregaron precios competitivos, no fue posible adjudicarse los bloques horarios ofertados, por lo que Sepúlveda señaló: “esperamos que las autoridades permitan que nuestra industria pueda ser parte del cambio de una matriz energética que funcione a base de energías renovables no convencionales”.