Quienes siguieron los consejos vivieron un promedio de 14 años más.
(CNN Español) – ¿Quieres prolongar tu esperanza de vida más de una década? Un nuevo estudio sugiere que lo puedes hacer tan solo siguiendo estos cinco hábitos de vida saludable: no fumes nunca, mantente en un índice de masa corporal saludable, realiza ejercicio de moderado a vigoroso, no bebas mucho alcohol y ten una dieta saludable.
Los que siguieron esos cinco hábitos a los 50 años vivieron un promedio de 14 años más, en el caso de las mujeres, y 12,2 años más, en los hombres, en comparación con los que no cumplieron ninguno de ellos, según el estudio publicado en la revista Circulation.
Según la investigación, cada uno de esos factores reduce el riesgo de muerte por enfermedades cardiovasculares y cáncer.
“Estas son algunas de las principales causas de muerte prematura, por lo que al prevenir o reducir la incidencia de esas enfermedades, se promueve la longevidad y también se mejora la supervivencia después del diagnóstico de esas enfermedades“, dijo el doctor Meir Stampfer, profesor de medicina de Harvard, que fue coautora del estudio.
“Podemos hacer mucho para lograr tener una vida larga y saludable con cambios mínimos bastante simples, y solo el 8% de los adultos en nuestro país (Estados Unidos) los está siguiendo“, agregó.
“El mensaje es que con cambios simples en nuestro comportamiento diario podemos tener grandes ganancias en nuestra salud y longevidad y, como país, creo que tenemos que facilitarlo promoviendo que la gente deje el tabaco, proporcionando mejores entornos para la actividad física, etc.”.
El impacto “sorprendente” de los comportamientos sobre la longevidad
Para realizar el estudio, los investigadores midieron el vínculo entre los cinco factores de estilo de vida y la muerte prematura utilizando datos del Estudio Nacional de salud de enfermeras y el Estudio de seguimiento de profesionales de la salud. Los datos se recabaron entre 1980 y 2014 e incluyeron a más de 122.000 personas.
Luego, los investigadores usaron datos de las Encuestas Nacionales de Examen de Salud y Nutrición para estimar la distribución de esos factores de estilo de vida entre los adultos en Estados Unidos. Esos datos, de 2013 a 2014, incluyeron información de 2.128 adultos de entre 50 y 80 años.
Los investigadores también obtuvieron las tasas de mortalidad de adultos estadounidenses utilizando la base de datos en línea de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades.
Después de analizar los datos, descubrieron que, en 2014, la esperanza de vida total proyectada a los 50 años era de 33,3 años adicionales para las mujeres y 29,8 años más para los hombres.
Sin embargo, entre los adultos que dijeron haber adoptado los cinco hábitos de vida saludable, los investigadores descubirieron que vivieron 43,1 años más en el caso de las mujeres y 37,6 años más los hombres.
Entre los adultos que no seguían ninguno de los cinco hábitos de vida saludable, los investigadores vieron que las mujeres vivían un promedio de 29 años adicionales, mientras que los hombres vivían otros 25,5 años.
“Para mí, lo sorprendente es lo fuerte que era el vínculo: el enorme impacto que podían tener estos simples hábitos en la esperanza de vida”, manifestó Stampfer. “Me sorprendió que fuera tan pronunciado“, añadió.
El estudio tiene algunas limitaciones, incluyendo el hecho de que fueron los propios participantes los que declaraban si seguían o no estos hábitos, lo que podría ser susceptible de errores de medición.
Además, el análisis de datos no incluyó medidas de ciertas condiciones de salud que son factores de riesgo que reducen la esperanza de vida, como la diabetes o la presión arterial alta.
Sin embargo, esa limitación “es tanto una fortaleza como una limitación, en cierto modo… porque lo que estamos estimando aquí es la prolongación de la esperanza de vida basada únicamente en los comportamientos”, explicó Stampfer.
“Obviamente, es mucho mejor adquirir estos comportamientos saludables desde la infancia, en realidad, pero si tienes más de 50 años, más de 60 años, más de 70 años, no es demasiado tarde”, agregó.
Este es el hábito de vida más “poderoso”
Los hallazgos deberían alentar y motivar a las personas a adoptar un estilo de vida más saludable, comentó el doctor Douglas Vaughan, de la Facultad de Medicina Feinberg de la Universidad Northwestern, que no participó en el estudio.
Aunque la investigación destacó cómo la combinación de los cinco factores podría ayudar a prolongar la esperanza de vida, Vaughan señaló cómo cada factor individual también reduce el riesgo de muerte prematura.
“Parece que fumar cigarrillos tiene un efecto más poderoso que los demás cambios del estilo de vida. Ciertamente, mantener un índice de masa corporal (IMC) razonable es una excelente manera de protegerse de la diabetes”, dijo Vaughan.
El índice de masa corporal, un cálculo derivado del peso y la altura de una persona, se usa como herramienta de detección de la obesidad. Normalmente, se dice que un índice de masa corporal normal o saludable está entre 18,5 y 24,9.
El doctor Jack Der-Sarkissian, médico de medicina familiar y director médico adjunto del área del Kaiser Permanente Los Angeles Medical Center, dijo que fumar es “el factor de riesgo de salud menos debatido”.
“Además del riesgo de cáncer, fumar contribuye a desarrollar enfermedades pulmonares, cardíacas y diabéticas. El estudio muestra que incluso el tabaquismo mínimo —de uno a 14 cigarrillos por día— se asocia con un aumento de la mortalidad por cáncer y enfermedad cardíaca”, dijo Der- Sarkissian, quien no participó en el nuevo estudio.
En cuanto a algunos de los demás factores del estilo de vida, “tener un peso por debajo de un IMC de 30 parece ayudar considerablemente, según el estudio. Un mayor peso corporal está relacionado con un mayor riesgo de diabetes y cáncer, entre otras afecciones relacionadas con la obesidad”, dijo. “El estudio sugiere realizar una actividad física de al menos 30 minutos al día, entre moderada y vigorosa, como caminar a paso rápido”.