El abogado querellante Nelson Caucoto expresó que tras el resultado de hoy, "mañana habrá un día más luminoso para los familiares de las víctimas de Paine".
Este martes y tras 49 años desde cometidos los crímenes, la Corte Suprema, a través de su Segunda Sala Penal, emitió el fallo definitivo en el denominado caso Paine, uno de los más emblemáticos de la dictadura militar.
El fallo condena a 11 ex uniformados que fueron acusados por el homicidio calificado de 36 trabajadores agrícolas y dos empresarios en la localidad de Paine, específicamente en la cuesta Chada y la quebrada Los Quillayes el 3 y 16 de octubre de 1973, a manos de la Escuela de Infantería de San Bernardo.
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En un fallo histórico, los ministros condenaron a Jorge Romero Campos y Arturo Fernández Rodríguez, capitán y subteniente del Ejército, respectivamente, a 20 años de presidio mayor en su grado máximo como autores del secuestro calificado de las víctimas.
En este caso, el máximo tribunal aumentó sus penas en relación al fallo de segunda instancia dictado por la Corte de Apelaciones de San Miguel, en el cual Romero venía condenado a 15 años y Fernández a 10.
Del mismo modo, la Corte elevó las penas para el cabo José Vásquez Silva y a los conscriptos Carlos Lazo Santibañez, Juan Opazo Vera y Carlos Durán Rodríguez de 5 a 10 años de presidio mayor en su grado mínimo también como autores de homicidio calificado.
La misma pena recibieron los conscriptos Roberto Pinto Labordarie, Jorge Saavedra Meza y Víctor Sandoval Muñoz.
Cabe señalar que para todos los condenados, la Corte Suprema recalificó los delitos en relación al fallo de segunda instancia. Del mismo modo, los ministros reconocieron la colaboración que tuvieron los conscriptos mediante sus declaraciones, las cuales habrían aportado en las identificaciones de las personas y los hechos.
Por su parte, el capitán de Carabineros Nelson Bravo Espinoza fue condenado a 10 años de presidio mayor en su grado medio, elevando su pena en 5 años y recalificando su delito de autor de secuestro simple a secuestro calificado de Ramón Capetillo Mora y Mario Muñoz Peñaloza, ocurrido entre el 8 y 10 de octubre de 1973.
El abogado querellante de este caso, Nelson Caucoto, quien representaba a los familiares de 37 víctimas, se mostró satisfecho con el resultado, ya que la Corte Suprema acogió todos los recursos de casación presentados.
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“Mañana habrá un día más luminoso para los familiares de las víctimas de Paine, ejecutadas por militares de la Escuela de Infantería de San Bernardo, un día plagado de nuevas sensaciones y esperanzas”, señaló el licenciado.
Además, expresó que se ha “logrado vencer la impunidad, la indolencia y la barbaridad. Lo que ha hecho la Corte Suprema es un acto de sanidad para esos familiares y para la sociedad chilena en general”.
Experto en política estadounidense y ex subsecretario de Asuntos Hemisféricos de EE.UU., el cientista político chileno analiza las elecciones presidenciales y su impacto en la relación de EE.UU. con América Latina.
