Tomando como base los datos de la PSU de 2018, solo el 0,8% de quienes rindieron el test de Historia se habrían visto perjudicados con el sistema de sustitución de puntajes.
Este jueves, el vicepresidente del Consejo de Rectores (CRUCh), Aldo Valle, fue parte de la sesión especial de la Comisión de Educación de la Cámara, para dar cuenta del proceso de la fallida PSU 2019, evaluación que se vio afectada por una serie de manifestaciones y la filtración del examen de Historia.
En la instancia, el rector presentó una simulación del posible efecto de la fórmula planteada para este año, la cual propone reemplazar el puntaje de la PSU de Historia con el más alto de las otros factores de postulación: los test de Lenguaje, Matemática y Ciencias, el NEM o el ránking.
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Según indicó Valle, el 80% de los puntajes se verían beneficiados al tener mejor rendimiento en los otros instrumentos. Esto, tomando como base los datos de 2018.
Por contraste, el 19% de esta muestra, solo el 0,8% habría visto afectado su puntaje, ya que corresponde a los alumnos que obtuvieron un buen rendimiento en el test de Historia (más de 600 puntos).
Según este análisis, si se hubiera reemplazado la prueba de Historia por el otro mejor puntaje, se estima también que el 51% habría usado el ranking de notas, el 18% la prueba de Matemáticas, 16% la correspondiente a Lenguaje, 13% por NEM y 3% la prueba de Ciencias.
“El porcentaje de estudiantes que ve aumentado su puntaje es proporcionalmente mayor en los estudiantes de colegios municipales, técnico-profesionales y de las mujeres, es decir, esa solución tiene un efecto de inclusividad, redistributivo, porque el ranking y el NEM son los dos factores que de mejor manera cumplen eso”, sostuvo Valle.
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El rector presentó además un análisis de lo que hubiera pasado en el caso de las postulaciones a carreras que toman en cuenta el puntaje de la PSU de Historia.
Según detalló, los puntajes ponderados subirían 9 puntos para los estudiantes de colegios municipales; 7 puntos en los de colegios particulares subvencionados; 5 puntos en lso de colegios particulares pagados; 12 puntos en los pertenecientes a liceos técnico-profesionales; 6 puntos en los colegios científico-huamnistas.
Por sexo, las mujeres aumentarían 9 puntos y los hombres subirían 4 puntos con la fórmula planteada por el CRUCh.
A pesar de estas estimaciones, Valle reconoció que se deben buscar soluciones para los casos que no se ven favorecidos con la sustitución de puntajes. Por ejemplo, “que se incremente el sistema de admisión especial, de modo que los alumnos que no acepten el ajuste automático porque no los beneficia, pudieran tener alguna respuesta”.
“Hay que buscar una manera de que el sistema en su conjunto no se detenga, pero no niego que tenemos que evaluar todavía la situación de aquellos jóvenes que pudieran hallarse en una situación de menoscabo”, agregó la autoridad.