Carolina Urrejola: “Está claro que el gobierno venezolano ya tomó como fetiche enfrentarse a Chile”

Por Carolina Urrejola

21.06.2024 / 10:52

La conductora de CNN Chile Radio reflexionó sobre los recientes dichos del "número 2" en el poder venezolano, Diosdado Cabello.


“Este bobo se mete con Venezuela y es incapaz de gobernar su propio país”.

Esa fue la declaración de ayer de Diosdado Cabello, el conocido segundo hombre de la dictadura de Nicolás Maduro en Venezuela y que además es diputado de la Asamblea Nacional, otra institución que al igual que la Fiscalía Venezolana son sólo un órgano más del régimen totalitario. No hay separación, no hay independencia de poderes, desgraciadamente, en ese país.

En la frase Cabello alude al presidente Gabriel Boric que en su gira a Europa declaró que las instituciones venezolanas estaban claramente debilitadas, un eufemismo propio del lenguaje diplomático, podríamos decir, porque lo cierto es que en el país caribeño la democracia está capturada hace años. No es deterioro, es destrucción de las instituciones.

Como sea, es un nuevo episodio de fricción entre Chile y Venezuela que provocó aquí la crítica unánime de todos los sectores políticos. Está claro que el gobierno venezolano ya tomó como fetiche enfrentarse a Chile y no puede descartarse que el objetivo final del régimen sea forzar el rompimiento de relaciones. En ese escenario Venezuela no tendría que responder por los cientos de miles de desplazados que viven en nuestro país, ni por su responsabilidad en delitos cometidos en nuestro suelo, entre ellos el crimen del ex militar Ronald Ojeda.

¿Qué debe hacer Chile? ¿escalar la molestia? ¿traer de vuelta al embajador? ¿hacer oídos sordos? A fines de julio son las elecciones presidenciales en Venezuela. La dictadura ha hecho todo lo posible por evitar la competencia, sacando de carrera a la popular opositora Corina Machado, que sin embargo, apoya y hace campaña por el nuevo candidato de la oposición. Tal es el pánico a perder el poder, que el gobierno venezolano cerró un local de comida de dos modestas hermanas venezolanas que tuvieron la osadía de venderle comida a la comitiva de Corina Machado.

Cuando una tiranía tiene miedo, se muestra más fuerte y autoritaria que nunca. Volviendo al presidente Boric, ¿qué bien haría el mundo político local en no mostrar fisura frente a esta ofensa y este insulto del madurismo y tratar con astucia el tema de si cortar o no cortar relaciones con Venezuela?