El exconvencional contó que tras la campaña por el Apruebo se quedó sin dinero y tuvo que volver a ejercer como abogado independiente. Se cambió de casa a un departamento y tuvo que recortar todo tipo de gastos. "Esto fue como inmolarse solo, ¿podrías decir que de huevón? Sí, podría ser", comentó.
El abogado y exconvencional constituyente Daniel Stingo habló sobre los problemas económicos que sufrió tras el triunfo del Rechazo en el plebiscito de salida del primer proceso constituyente. “Yo no tenía canas antes de meterme a la Convención”, dijo a revista Sábado.
El conductor y miembro del directorio de La Voz de los que Sobran (LVQS) contó que destinó gran parte de sus fondos a la campaña del Apruebo para el plebiscito de salida.
“Me quedé sin plata. Tuve que volver a mi oficina, donde sigo ahora, como abogado independiente. Tuve que volver a decirme: ‘mira, el ejercicio profesional es a lo que me dedico ahora, de nuevo’. Eso ha costado mucho”, relató.
En un momento incluso tuvo que pedir apoyo económico a su papá, “porque no tenía ni uno”. Cuando acabó el proceso constitucional, “no tenía trabajo, no tenía nada”.
Para reducir gastos, abandonó la casa que arrendaba en Las Condes y se radicó junto a su familia en su parcela de Buin, mientras esperaba recibir el departamento que hoy arrienda en La Reina.
“El departamento es bien chiquitín”, contó. “Así que cuando me dicen ‘ladrón’, por favor, anda a ver dónde vivo. Tengo el mismo auto de hace 20 años”, agregó.
Stingo contó que por la disminución de ingresos cambiaron varias cosas en su vida: “Los espacios, muchos gastos que teníamos se fueron, no sé, desde el paseo del perro, ponte tú. Antes teníamos una paseadora de perro, porque el perro es bastante grande, un border collie, entonces le gusta moverse. Otras cosas, no sé, alarmas chao, cable chao, varias cosas que no necesitái al final del día”
Junto con estas dificultades, el exconvencional ha tenido que enfrentar “mucha descalificación en la calle” por su postura en la Convención, pues vivía en un sector donde la opción preferente siempre fue el Rechazo: Las Condes. “¡Rechazo!”, “¡devuelve la plata!”, son algunas de las consignas que ha escuchado dirigidas a sí mismo en la calle.
Consultado sobre si valió la pena pasar por todo esto, Stingo respondió: “Yo creo que, en términos muy personales, gané experiencia. Pero claramente en términos muy individualistas, su tú quieres, he perdido no más. En ese sentido, he perdido mucho. He perdido por todos lados. Esto fue como inmolarse solo, ¿podrías decir que de huevón? Sí, podría ser“.