El Partido Demócrata Cristiano anunció el término del acuerdo administrativo que mantenían con las coaliciones de oposición, luego que cinco diputados se abstuvieran en la moción de censura contra la mesa directiva.
Finalmente la polémica moción de censura a la mesa directiva de la Cámara de Diputadas y Diputados no continuará su camino, luego que no obtuviera los votos suficientes y fuera mayoría la negativa.
Con 68 votos a favor 69 en contra y 5 abstenciones, la acción no sólo no logró su objetivo, sino que incluso generó una fracción al interior de la ya dividida oposición. Esto, pues el Partido Demócrata Cristiano (PDC) terminó el acuerdo administrativo con el resto de los partidos.
Este quiebre es sólo un hecho dentro de la historia reciente de división que vive la oposición, luego que aún siendo mayoría en la Cámara Baja no pudieran liderar la mesa directiva, acuerdo que incluía poner a alguien del PDC a la cabeza.
Esta moción de censura ya venía circulando desde hace unos meses, considerando que había que generar un cambio ante una mayoría circunstancial que no se veía reflejada en la mesa directiva, según los partidos que la secundaron.
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En este caso, la moción fue levantada por los diputados Alexis Sepúlveda (PR), Giorgio Jackson (RD) y las diputadas Claudia Mix (Comunes) y Camila Vallejo (PC). Esta se respaldaba en que en una sesión no se dejó votar telemáticamente a Vallejo ni al diputado Cristóbal Urruticoechea (RN).
El trasfondo del asunto fue expuesto por Gonzalo Winter (CS), quien mencionó que además del derecho a voto que habría sido vulnerado estaba en cuestión la representatividad de la mesa frente a la mayoría política de la corporación.
Sin embargo no contaban con que votos clave en la oposición se convertirían en abstenciones: Florcita Alarcón (PH), Jenny Álvarez (PS), Renato Garín (Independiente), Félix González (PEV) y Pamela Jiles (PH).
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“Hipocresía” en la oposición
Desde el PDC, el jefe de bancada Daniel Verdessi indicó que “el desahucio es al acuerdo original que se realizó hace tres años atrás”, asegurando que era un acuerdo “que no se cumple por la fuerza de los hechos“.
“Vamos a mantener las presidencias que tenemos ahora hasta que se pueda hacer un cambio en las mesas que no ha sido posible en dos oportunidades. Esta declaración es para que cualquier nuevo acuerdo tiene que replantearse el tema integralmente“, dijo Verdessi.
Por su parte el diputado demócratacristiano Gabriel Silber insistió en que están “siempre disponibles para conversar”, aunque desahucian el acuerdo porque considera “hipócrita el querer sostener algo que en la práctica no existe“.