Luego de semanas de movilizaciones, ambas partes acordaron un reajuste del 3,2%.
Los trabajadores del sector público depusieron el paro nacional por el reajuste salarial.
Los empleados fiscales, si bien anunciaron que retomarán sus funciones, reiteraron su rechazo al proyecto que adecúa en 3,2% sus ingresos. El movimiento mostró su descontento ante la iniciativa y se manifestó frente a La Moneda.
Carlos Insunza, Coordinador de la Mesa del Sector Público, declaró que “es evidente que el resultado final que ha tenido este proceso de legislación del reajuste general es un resultado que rechazamos”.
Esteban Maturana, presidente de la Confusam, pidió disculpas a la ciudadanía en nombre de los funcionarios públicos por los días que estuvieron paralizados, indicando que “la culpa y la responsabilidad no es nuestra”. Además, añadió que “era mucho más barato para las arcas fiscales llegar a un acuerdo que sostener el paro”.
Maturana también le envió un mensaje al Gobierno, donde señala que “esta mesa ya está preparando nuestras movilizaciones, nuestra negociación para el año 2017”.
Esta protesta estuvo marcada por el enfrentamiento con Fuerzas Especiales de Carabineros, y donde incluso se manifestaron contra los equipos de prensa que cubrían la manifestación. Los incidentes obligaron a cerrar los accesos a La Moneda y a cortar el tránsito en este sector de la capital. Antes de esto, los dirigentes confirmaron que durante el próximo año volverán a movilizarse para exigir mejores condiciones laborales.
Experto en política estadounidense y ex subsecretario de Asuntos Hemisféricos de EE.UU., el cientista político chileno analiza las elecciones presidenciales y su impacto en la relación de EE.UU. con América Latina.
