Presidente Piñera a CNN y CHV Noticias: “En Chile tenemos una crisis de la política”

El presidente Sebastián Piñera (SP) habló con los periodistas Macarena Pizarro (MP) y Daniel Matamala (DM) a 24 horas de su discurso a la nación en el Salón de Honor del Congreso Nacional.

Pizarro fue la encargada de abrir el encuentro, recordando que uno de los momentos más aplaudidos de la Cuenta Pública fue cuando el mandatario anunció la reducción de parlamentarios retornando la Cámara Baja a 120 diputados y la disminución del número de senadores a 40.

MP: “Usted dijo que era para oxigenar nuestra política, para dar oportunidades de participación ciudadana a todos nuestros compatriotas. Usted coincidirá conmigo que en la última elección hubo una renovación del congreso. muchas caras nuevas. ¿Cómo va a hacer para que esto no signifique un retroceso?”

SP: “No va a ser un retroceso, yo creo que 120 diputados y 40 senadores es lo que Chile necesita y también hay que poner un límite a las reelecciones en el mismo territorio.  Estamos pensando en que los diputados se puedan reelegir dos veces, es decir, 12 años. Los senadores, una vez, 16 años. Y vamos a aplicar lo mismo para los alcaldes.

Esto es para producir más  renovación, más oxigenación y para que no se queden los mismos de siempre en los mismos lugares de siempre.

MP: Ahora, la próxima elección que hay es justamente la elección municipal el próximo año y hay más de 25 alcaldes que llevan 20, hasta 28 años, en sus cargos. ¿Ellos van a poder reelegirse el próximo año?

SP: Sí, porque esta no es una norma que se aplique de forma retroactiva. Es de aquí para adelante.

DM: ¿Lo mismo vale para los senadores? Para entender, un senador que ya lleve un largo tiempo en ejercicio, se elige de nuevo; el 2021 sería la primera vez, 2029 la segunda y podría quedarse hasta el 2037.

SP: Lo mismo. Va a poder reelegirse una vez y, por tanto, se puede elegir en la próxima elección y reelegirse posteriormente.

DM: ¿Y, por qué se permite que se mantengan cambiándose de territorio, de región? Porque por eso un parlamentario podría quedarse toda la vida en el Congreso.

SP: Claro, pero van a una ciudadanía distinta y por tanto, todas las malas prácticas de clientelismo se terminan con estas normas porque se va a otro territorio. Esto lo pensamos mucho porque hay algunos parlamentarios que son muy buenos parlamentarios y queremos no impedirles que puedan seguir en esa función pero en otro territorio. Es decir, no en el mismo lugar donde habían sido elegidos antes.

DM: ¿No queda muy a largo plazo esta oxigenación si finalmente hay que esperar hasta el 2037 o 2041 para que puedan cambiarse de región o retirarse?

SP: Sí, queda a largo plazo, pero la alternativa era aplicarlo de forma retroactiva y yo creo que eso no es bueno. Cuando uno cambia las reglas, en general tiene que ser de aquí para adelante para que todo el mundo conozca las reglas.

MP: Presidente, hablemos de la reforma de pensiones. Usted dijo ayer que el ahorro previsional le pertenece a los trabajadores y que tienen derecho a elegir quién los administra. La Democracia Cristiana respondió que usted descaradamente desconoce los acuerdos ¿Qué les responde?

SP: Yo pediría en primer lugar suprimir esos adjetivos. “Descaradamente”, “brutalmente”, no es parte de un diálogo respetuoso.  Y quiero decirle a la Democracia Cristiana, tenemos un acuerdo con la Democracia Cristiana, ese 4% de ahorro adicional que lo van a pagar los empleadores y que va a ir a la cuenta de ahorro individual de cada trabajador, lo va a administrar un consejo o ente público, donde no van a participar las AFPs, pero lo que queremos que ese consejo o ente público le de, en la medida de lo posible -lo discutiremos en el Congreso-, opciones y alternativas de elección; por ejemplo, puede que cree varios fondos y que los trabajadores puedan elegir.

Pero, lo importante, es que yo dije ayer dos cosas que creo que son verdades del porte de un buque. Primero, el ahorro previsional le pertenece a los trabajadores de Chile y nadie tiene derecho -en nuestra opinión- a meterle mano a ese ahorro o a desviarlo a otro propósito y, segundo, que los trabajadores tienen derecho a elegir y que esperamos, cumpliendo el acuerdo con la Democracia Cristiana, le demos opciones de elegir a nuestros trabajadores.

DM: ¿No es contradictorio decir, como dijo ayer presidente -y usted lo recuerda bien- que los trabajadores tienen derecho a decidir quién lo administra y, al mimo tiempo decir que esto lo va administrar un ente público? Porque ahí el trabajador no puede elegirlo, lo está administrando un ente público, más allá de lo que haga luego con el fondo.

SP: Tiene opciones dentro del marco de la ley, el consejo público o el ente público va a fijar las políticas, las reglas, va a supervigilar el buen funcionamiento del sistema, pero va a poder contratar a instituciones especializadas, por ejemplo, para hacer las inversiones. Va a poder crear varios fondos y -en consecuencia- dentro de ese consejo público, los trabajadores -y esto es lo que queremos impulsar- que tengan la mayor posibilidad de elección posible.

DM: ¿Y eso no se parece mucho a los actuales multifondos en que hay un ente que supervisa a la superintendencia y luego uno puede elegir el fondo en que está? ¿No es un poco lo mismo?

SP: Bueno, estamos tomando esa idea para este 4% adicional, pero lo importante aquí -le quiero decir a la Democracia Cristiana- es que no reaccionen en forma prematura o sin haber analizado a fondo. Vamos a cumplir nuestros acuerdos con la Democracia Cristiana porque nuestro gobierno cumple sus acuerdos.

MP: Presidente y -más allá del detalle de la reforma que se verá en el Congreso- usted ayer hizo un gran llamado a un acuerdo nacional, pero el primer hecho político concreto de su discurso es justamente este congelamiento del diálogo que ha decretado la Democracia Cristiana… ¿siente desilusión?

SP: Yo creo, de verdad Macarena, que en Chile tenemos una crisis de la política y de la fortaleza de nuestras instituciones. Esto se refleja en la mala opinión y en el divorcio, en el distanciamiento que tienen los ciudadanos con la política y también en la caída en la confianza de los ciudadanos en instituciones tan importantes como el Poder Judicial, el ministerio Público, las Fuerzas Armadas y también la Fiscalía, los organismos políticos.

Lo que estamos proponiendo es un acuerdo para mejorar la calidad de la política que se ha ido deteriorando y fortalecer nuestras instituciones que se han ido debilitando. Y cumplir el acuerdo con la Democracia Cristiana, importante y espero que la Democracia Cristiana -cuando pueda analizar a fondo lo que yo dije ayer- vea que vamos a cumplir nuestro acuerdo y que están convocados a este acuerdo nacional para tomar el toro por las astas y no permitir que el deterioro de la política ni de las instituciones nos lleven a estadios o lugares donde no queremos estar.

MP: ¿Tiene pensado hacer algo para recomponer la relación? Invitarlos a una reunión, explicarles personalmente lo que quiso decir…

SP: Bueno, ya los ministros explicaron ayer de forma muy clara; el ministro del Trabajo, el ministro de la Presidencia, el ministro de Hacienda. Y, por tanto, yo creo que esto fue una mala interpretación de mis palabras, pero yo repito mis palabras, el ahorro previsional le pertenece a los trabajadores chilenos y por tanto no vamos a permitir que alguien les meta mano, lo desvíe, porque estaría quitándoles algo que les pertenece y queremos dar la mayor capacidad de elegir a nuestros trabajadores ¡Quién puede estar en desacuerdo con eso, por dios!

DM: Y en esa capacidad para elegir, presidente ¿podría ser también para los fondos actuales? Porque en los fondos que actualmente uno cotiza está obligado a ponerlos en una AFP, puede elegir entre las AFP ¿No debería haber también mayor posibilidad de elegir en esos fondos?

SP: Bueno, el proyecto de ley amplía la competencia dentro de la industria de las administradoras. Facilita el ingreso, rebaja el encaje, establece que se puedan licitar las carteras para que las personas tengan más posibilidades y, por tanto, la elección está dentro del marco de la ley. No cualquiera puede administrar los fondos de pensiones, estamos hablando de las jubilaciones de los chilenos. Tiene que haber garantías de seguridad, tiene que haber garantías de buena conducta y por tanto, estamos buscando la mayor amplitud posible.

DM: Pero, presidente ¿usted descarta que este ente público también pudiera hacerse cargo, si es que un trabajador -así lo quisiera- de la administración de su actual porcentaje?

SP: Hoy día estamos con dos sistemas que son paralelos, uno es el actual sistema que administra el 10% y otro es el nuevo sistema -donde no participan las AFPs- que va a administrar el 4%. Ese es el estado en el que estamos hoy día.

Pero lo más importante de esto, vamos al fondo de la reforma previsional, necesitamos una reforma previsional. Esta reforma va a mejorar las pensiones de 1.600.000 chilenas y chilenos que reciben el Pilar Solidario. Va a mejorar la Pensión Básica Solidaria, va a mejorar el Aporte Previsional Solidario, partiendo de inmediato con un 10% y llegando hasta un 60% de aumento y eso va a beneficiar a dos tercios de los beneficiarios del Pilar Solidario, que son mujeres. Pero, además, esta reforma crea un segundo piso del Pilar Solidario, a mi juicio, justo, urgente, necesario, para favorecer a sectores que nunca habían tenido una ayuda del Estado: La clase media, las mujeres -que están muy perjudicadas en este sistema previsional- los adultos mayores no valentes y los que voluntariamente extiendan su fuerza de trabajo más allá de la edad legal de jubilación van a recibir un apoyo adicional.

El esfuerzo fiscal que esto significa, Macarena, son 3.500 millones de dólares. Es el esfuerzo fiscal más grande que se haya hecho en la historia de Chile para mejorar las pensiones de los chilenos y digo esto porque algunos consideran que todo es insuficiente.

MP: Presidente, casó sorpresa para algunos que usted ayer hablara del crecimiento entre un 3 y un 3,5% ¿Es oficialmente una rebaja a las expectativas del gobierno?

SP: Por supuesto. Mire, el año 2018 fue un muy buen año para Chile. Yo sé que a algunos no les gustan las buenas noticias, pero cuando el país crece al 4% triplicando el crecimiento del gobierno anterior,  triplicando el crecimiento promedio de América Latina, liderando nuestro continente más que el mundo, creamos más de 160.000 nuevos empleos con contrato, con seguridad, con previsión social. Cuando la inversión y la productividad que venían cayendo como piedras se recuperan con fuerza, cuando logramos crear 130.000 nuevas empresas y emprendedores… fue un buen año para Chile bajo todo punto de vista.

Ahora, suficiente no, nunca es suficiente. Este año es más difícil y es más difícil por muchas razones, primero porque la economía mundial se ha debilitado. El comercio mundial no está creciendo, está cayendo y para un país como Chile, abierto al mundo, es muy importante. Los términos de intercambio, el precio del cobre ha caído, el precio del petróleo ha subido. Además estamos en medio de una Guerra Comercial tarifaria, tecnológica, entre dos gigantes -China y Estados Unidos- que nos está perjudicando.

Todo eso son condiciones más difíciles que las que predijeron todos y un gobierno responsable se hace cargo de eso, pero a pesar de las condiciones difíciles quiero decirle a mis compatriotas que Chile va a resistir muy bien estos tiempos difíciles. Vamos a crecer entre 3 y 3,5%, liderando América Latina, superando al mundo. Vamos a crear más de 160.000 nuevos empleos con contrato, con seguridad social, los salarios van a seguir creciendo, la inversión y la productividad van a seguir recuperándose. Todo eso en tiempos difíciles y, por tanto, lo que hice ayer fue un acto de seriedad, de responsabilidad, de hablar con la verdad.

DM: Presidente, usted reitera dos veces el término “tiempos díficiles” ¿Pasamos de la promesa o de las expectativas de “tiempos mejores” a la realidad de tiempos difíciles?

SP: No. “Tiempos mejores” es por lo cual el gobierno está luchando siempre, para crear tiempos mejores. “Tiempos difíciles” es lo que está pasando hoy día en el mundo.

Déjeme decirle algo, yo converso con mucha frecuencia con los presidentes de América Latina. Veamos qué está pasando en nuestros países cercanos. Argentina lleva 14 meses de recesión, Brasil lleva cuatro años de estancamiento y en un trimestre tuvo crecimiento negativo, para no hablar de Venezuela y, por tanto, en el mundo estamos viviendo tiempos difíciles y Chile está -a mi juicio- resistiendo muy bien y sorteando bien estos tiempos difíciles.

DM: Ahora, aún así en el primer trimestre, por ejemplo, el crecimiento de Chile fue inferior al de otros países de la Alianza del Pacífico como Colombia, Perú, que crecieron al 2,3%. Parece que ellos están haciendo algo mejor que nosotros, en ese ámbito.

SP: El primer trimestre fue un trimestre muy difícil para todos nosotros porque además coincidieron otras cosas. Los aluviones en el norte, las inundaciones, detuvieron gran parte o una parte de la actividad minera. Codelco tuvo que concentrar todas sus mantenciones que se habían postergado hace mucho tiempo en el primer trimestre. Pero, yo le aseguro, Daniel, que vamos de menos a más. El segundo trimestre va a ser mejor que el primero, el segundo semestre va a ser mejor que el primer semestre y, por tanto, Chile va a estar liderando el crecimiento y el desarrollo en América Latina.

DM: Y los tiempos mejores ¿cuándo se van a sentir en el bolsillo de la gente, que tanto lo piden?

SP: Bueno, nunca los ciudadanos van a estar contentos porque siempre todos queremos más. Pero, déjeme decirle algo, Daniel, el año pasado hubo récord de venta de viviendas, récord histórico de venta de automóviles, récord en las ventas de los establecimientos comerciales, récord en cuanto a turismo interno, venta de pasajes y, por tanto, esas son manifestaciones de que cuando la economía crece también las personas se benefician. Pero, por supuesto que esto no termina nunca, por eso yo como presidente me levanto en la mañana muy temprano, me acuesto tarde, en las noches, muy tarde viendo cómo podemos hacer que la economía avance más rápido, que podamos crear más y mejores empleos, que podamos mejorar los salarios, que podamos crear oportunidades, que podamos hacer que esos tiempos mejores lleguen a todas las familias chilenas.

MP: Presidente, a pesar de esas buenas cifras, si es que tomamos el total de su gobierno, al menos el 2018, hemos escuchado en los últimos días críticas por parte del empresariado que han dicho, por ejemplo, que el gobierno genera muchas expectativas y después se desinfla, o han mostrado preocupación por la lentitud en la Reforma Tributaria ¿Siente que son justas esas críticas?

SP: Bueno, todo el mundo tiene derecho a criticar, pero es muy contradictorio. Hemos puesto todo el esfuerzo del mundo en sacar adelante la Reforma Tributaria y los empresarios saben, o debieran saber, que tenemos minoría en el Congreso, que estuvo a punto de rechazarse la idea general de legislar y, por tanto, es tan fácil hablar desde para la galería… es como si yo le dijera ¡cómo es posible que la economía no esté creciendo si ustedes son los empresarios, los que tienen que hacer crecer a la economía!

Yo entiendo que nada en la vida es fácil, por eso esa crítica de los empresarios -la verdad- no me parece justa. Y de algunos empresarios y los tenemos muy localizados, muy identificados porque la mayoría de los empresarios yo creo que aprecian el enorme esfuerzo que estamos haciendo como país para haber logrado un gran año 2018 y para estar resistiendo muy bien en medio de tiempos difíciles que en otros países, vecinos nuestros, los están golpeando con mucha más dureza.

MP: Y, a pesar de que tiene el Congreso en contra ¿hay alguna autocrítica? ¿Todo tiene que ver con tener las dos cámaras en oposición o hay también una falta de habilidad en su equipo para negociar?

SP: Por supuesto que también hacemos autocríticas y reconocemos errores. Sería muy absurdo culpar de todo al Congreso, pero créame que hemos hecho los mejores esfuerzos, por ejemplo, hicimos un esfuerzo gigantesco para poder avanzar con la Reforma Previsional que es algo que los adultos mayores de Chile, presentes y futuros, necesitan con urgencia; para poder sacar adelante la Reforma Tributaria que va a darle un nuevo impulso a nuestra economía para que crezca más rápido, creen más empleos, mejoren los salarios.

Hablamos con todos, yo personalmente llamé a todos los presidentes de los partidos a una reunión tranquila, cierto, reposada, en La Moneda. Uno de ellos no quiso venir, el presidente del Partido Comunista no quiso venir. Creo que es un error no entender la democracia, los demás vinieron.

Ahora, yo le puedo decir con mucha franqueza, yo veo en la oposición mucha dispersión, pero veo dos almas. Hay una parte de la oposición que desde el primer día dijo que iba a negar la sal y el agua, y que se opone a todo; que ni siquiera están dispuestos a discutir la idea de legislar proyectos importantes para los chilenos. Hay otra parte de la oposición, la Democracia Cristiana, el Partido Radical, que ha tenido una buena voluntad para conversar, para dialogar. Yo creo que la segunda oposición es la que Chile necesita y no la primera.

MP: Presidente, en su primer año de gobierno usted ha tomado algunas decisiones que le han costado caro, al menos políticamente. Primero fue el nombramiento de su hermano en la embajada de Argentina, luego fue incluir a sus hijos en la gira presidencial y en algunas reuniones ¿No cree usted que no ha sabido leer el cambio que ha habido en la sociedad chilena que ya no ve con buenos ojos este tipo de acciones? Porque, al menos dentro de su mismo sector, sí hay gente que lo ve como un error.

SP: Bueno, sin duda que los estándares han cambiado y muchas de las cosas que antes eran normales y todo el mundo las aceptaba, ahora no las aceptan y créame que nos hemos puesto al día para entender ese nuevo estándar, esa nueva exigencia de la ciudadanía.

DM: Para entender una metáfora futbolística, usted había convocado al gabinete hace poco, les había dicho “ustedes hagan goles y no hagan autogoles” ¿no? Como un entrenador que le hace coaching a su equipo… ¿metió usted el autogol?

SP: Bueno, oiga, el presidente entrega lo mejor de sí mismo, trabaja incansablemente por hacer que la vida de los chilenos sea mejor, pero también comete errores.

DM: ¿Sus asesores le advirtieron que podía ser un error?

SP: No.

DM: ¿No le dijeron nada?

SP: No.

DM: ¿Cree que le faltan asesores que le digan ese tipo de cosas, que se las adviertan?

SP: Bueno, después de la batalla todos somos generales.

MP: Presidente y, a propósito de su equipo, del equipo que lo rodea y hablando de la negociación con el Congreso o en este caso, a lo mejor, de decisiones tomadas. Ha pensado comenzar esta nueva etapa, usted decía “viene un nuevo año, un nuevo aire para el gobierno” ¿tiene que ser con nuevo equipo?

SP: Bueno, un presidente está permanentemente evaluando a los ministros. Yo creo que tenemos un buen gabinete y esto de cambiar el gabinete es un deporte nacional. Yo leo las columnas y todo el mundo está proponiendo, es como que todos los chilenos somos entrenadores y hacemos la selección nacional.

Pero déjeme ir al fondo de dos temas que me parecen centrales: Uno es nuestro compromiso total y absoluto por compartir con fuerza y con todo el rigor de la ley la delincuencia y el narcotráfico. Le hemos dado golpes muy fuertes al narcotráfico en los últimos días, hemos desbaratado más de de 17 bandas que provocaban terror en muchas de las comunas.

Hemos identificados 33 lugares donde hay bandas de narcotraficantes que van a ser golpeadas con mucha dureza; recién detuvimos a los que participaron en el famoso narcofuneral con armas de guerra a plena luz del día, están detenidos y van a tener que enfrentar a la justicia; acabamos de darle un golpe muy duro también a los capos del narcotráfico que vivían como Pablo Escobar dentro de nuestras cárceles quitándoles todos los privilegios y eso es una lucha permanente porque yo entiendo que la primera prioridad de los chilenos es vivir en paz y con tranquilidad, y que la primera obligación de un gobierno es combatir con fuerza la delincuencia y el narcotráfico.

Y quiero decirles que ya está dando frutos, el año pasado la victimización, es decir el porcentaje de hogares que fueron víctimas de un delito, cayó de un 28,4 a un 25% ¿qué significa eso? Que en un año hemos logrado que medio millón de chilenos se libre de haber sido víctimas de la delincuencia.

DM: Presidente, en ese tema precisamente del narcotráfico, yo recuerdo que usted decía en su campaña del año 2009 usted ya decía “narcos, tienen los días contados”. Han pasado 10 años y parece que el narcotráfico lejos de haber desaparecido es más fuerte todavía ¿en qué fallamos?

SP: Bueno, Daniel, la lucha con el narcotráfico es una lucha muy difícil. Al frente tenemos un enemigo poderoso, con tecnología, con recursos, con sofisticación. Ningún país del mundo ha logrado derrotar al narcotráfico.

Nosotros, les puedo decir una cosa, lo estamos combatiendo con toda la fuerza de la voluntad y todo el rigor de la ley. Y en los últimos meses hemos logrado grandes avances como el desbaratamiento de decenas de bandas de narcotraficantes, ahora, yo sé que usted desbarata una banda y a veces inmediatamente surgen los reemplazantes; el cambio total de conducta con los narcotraficantes que estaban en las cárceles, los estamos combatiendo dentro y fuera de las cárceles.

Y otro elemento central, que yo creo que a veces pasa desapercibido, yo creo que este es un gobierno que ha entendido y comprendido las verdaderas prioridades y necesidades de nuestra clase media. La clase media chilena ha progresado mucho en base a su propio esfuerzo, se sienten orgullosos y con mucha razón, pero tienen temores, temor a que la pérdida del empleo, una enfermedad catastrófica, la educación superior de sus hijos, la tercera edad, cierto, vulnerable, los lleve de vuelta a un estado que habían superado.

Yo quiero decirle a la clase media chilena que la Red Clase Media Protegida lo que busca es que cuando tengan que enfrentar estos accidentes en el ciclo de la vida, no van a estar solos. Va a haber una mano eficaz y solidaria que los va a ayudar a enfrentar esos tiempos difíciles, a ponerse de pie y a volver a caminar.