Exconsejera constitucional renuncia a Republicanos: Denuncia a Hurtado por “humillarla” y destruir “la esencia del proyecto”
Por CNN Chile
28.11.2024 / 12:10
En su renuncia, Payauna acusa a Hurtado de "destruir la esencia del proyecto republicano" y de un abandono político hacia los exconsejeros constitucionales tras el plebiscito de salida de 2023.
La ex consejera constitucional por la Región de Tarapacá, Ninoska Payauna, presentó su renuncia al Partido Republicano debido a diferencias irreconciliables con la secretaria general de la formación, Ruth Hurtado.
Payauna acusa a Hurtado de destruir “la esencia del proyecto republicano” y de abandonar a los ex consejeros constitucionales tras el plebiscito de salida de diciembre de 2023.
En una declaración pública, Payauna destacó que, tras el plebiscito, no existió ninguna instancia formal para reflexionar ni analizar los resultados del proceso, lo que dejó “invisibilizadas” las opiniones de quienes formaron parte de la campaña.
Aseguró que, a pesar de varias solicitudes, la Directiva Nacional del partido desestimó la importancia de estos encuentros, justificándose en la falta de tiempo debido a las preparaciones para las elecciones municipales de 2024.
Además, Payauna reveló que, hasta la fecha, siete ex consejeros constitucionales han renunciado al partido, lo que representa casi un tercio de los miembros del órgano, advirtiendo que este número podría aumentar en las próximas semanas o meses.
La ex consejera también expresó su molestia por el comportamiento de la secretaria general del partido, Ruth Hurtado, a quien acusó de hacer juicios de valor sobre su persona y su rol como madre.
Payauna relató que compartió detalles de su vida personal con Hurtado, quien violó esa confianza al hacer comentarios perjudiciales sobre su figura, dañando su reputación y presentándola como una “mala madre”.
Asimismo, calificó esta actitud como “inaceptable” para una dirigente que, según ella, debería ser un modelo a seguir, especialmente para las mujeres en la política. Aseguró que los valores promovidos por Hurtado no representan lo que ella desea para el desarrollo de las mujeres en el ámbito político ni para el proyecto colectivo al que se había sumado, un proyecto que, según dijo, la hizo sentir “tremendamente humillada” por no cumplir con el “estándar moral” impuesto.