El intendente de la Región Metropolitana, no se arrepiente de haber asumido el cargo en medio del estallido social. "La verdad es que tendría que haber sido muy poco patriota para haber dicho que no", reconoció.
Felipe Guevara, intendente de la Región Metropolitana, ha sido cuestionado en el último tiempo por la oposición y por parte de la ciudadanía, debido a cómo ha enfrentado las manifestaciones en la capital y las estrategias que ha utilizado para restablecer el orden público.
En entrevista con La Tercera, el intendente hizo un repaso de su labor y reflexionó acerca de cómo se toma la acusación constitucional que diputados de la oposición presentaron en su contra.
Sobre este último punto, Guevara señala que “no considero que sea algo contra mí, en lo personal, es en contra del gobierno” y cree que lo que se busca con esto en impedir que gobiernen y “favorecer la inseguridad”, la cual, según dice, va contra el estado de derecho.
El ex alcalde de Lo Barnechea, defendió su actuar y resaltó que ha garantizado el derecho a reunión, porque “todas las movilizaciones y marchas que han pedido autorización, les he dado autorización. No importa si son políticas, si son culturales, si son deportivas”.
Al ser consultado sobre por qué no ha renunciado a pesar de la acusación que enfrentará,Guevara cree que “es muy injusta la acusación y renunciar significaría darles la razón a quienes injustamente usan un instrumento que es el más grave y más alto que tiene la Cámara de Diputados” y aseveró que la respuesta que corresponde es defenderse. “Los argumentos ponerlos arriba de la mesa. Eso es lo que voy a hacer”.
Sobre su gestión, el intendente aclaró que es el presidente quien debe evaluarlo y no él, pero admitió que se siente satisfecho con lo que ha hecho.”Siempre hay muchos desafíos, siempre se puede hacer mejor, pero estoy contento con lo que he hecho en estas semanas“.
Rol de la Intendencia y Carabineros en el orden público
En cuanto a la estrategia que usa la policía uniformada para establecer el orden público no es decisión de él, sino que de la misma institución y que su facultad como intendente es instruir a Carabineros para pedirles colaboración en esa tarea.
“De qué manera se hace, con cuántos carabineros, con cuántos lanzaguas, si se disparan bombas lacrimógenas, eso no depende de la autoridad política, sino que depende de la autoridad policial”, aclaró.
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En base a lo anterior, es que aseveró que no se siente responsable de coartar las libertades, como se le ha acusado. “Nada más lejano a lo que soy, a lo que ha sido mi historia. La libertad de expresión, he dicho siempre, las marchas, las manifestaciones, son una señal de sanidad democrática. En las democracias donde no hay participación y marchas, son pobres democracias”, sentenció.
Acerca de la polémica estrategia de copamiento policial en Plaza Italia, que hace unas semanas comenzó a funcionar y que fue anunciada por el intendente, dijo que esa idea nació de Carabineros y que él la informó. “Creo que es bueno mantener a la comunidad lo más informada posible. Y luego fue evaluada por mí, y yo creo que hay una buena evaluación de lo que ha hecho Carabineros. Por eso, yo he apoyado a Carabineros” apuntó.
Sumado a este apoyo, reconoció que desde la implementación de esa estrategia “los locales comerciales volvieron a abrir los lunes en la mañana el sector del barrio Bellavista también lo pudo hacer. A mí me parece que la estrategia de Carabineros fue exitosa del punto de vista de la convivencia y la ciudad”.
Pese al positivo balance que realizó de esta acción, el intendente no aseguró que fuera a continuar en los próximos días e informó que la estrategia que utilice Carabineros irá cambiando según las circunstancias, lo que ejemplificó con lo sucedido en Año Nuevo, donde la policía no estuvo resguardando con severidad el sector, sino que se mantuvo al margen de la celebración.
“Creo que el Año Nuevo demostró lo que estoy diciendo: que Carabineros tiene la capacidad para distinguir lo que es una fiesta, por mucho que se congregue mucha gente, de una manifestación violenta“, afirmó.
Guevara negó que esta diferenciación de obligaciones entre la policía uniformada y él fuera una forma de lavarse las manos y aseguró que lo que quiere es “domiciliar dónde corresponden” los deberes.
“Mi responsabilidad es usar todos los medios disponibles de la fiscalía, de los tribunales, de las policías, de la ANI, todo lo que tengo a disposición para que se mantenga el orden público. Ahora, dentro de cada uno de esos ambientes, cada uno tiene su responsabilidad”.
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Futuro político
El ex alcalde de Lo Barnecehea reconoció que a pesar de las contrariedades, no se arrepiente de haber llegado a la intendencia. Recordó que cuando Sebastián Piñera le ofreció ser el sucesor de Karla Rubilar, sintió que era su deber aceptarlo y “la verdad es que tendría que haber sido muy poco patriota para haber dicho que no”.
Guevara admitió que no tiene ninguna ambición parlamentaria, pero que le encantaría “ser el último intendente de la Región Metropolitana -porque la figura del intendente se acaba- y poder, entonces, ser el primer delegado presidencial”.