Feminismo y dieta parlamentaria en la cuarta cuenta pública del Congreso
La presidenta de la Cámara de Diputados y el presidente del Senado pronunciaron sus respectivos discursos ante la presencia del Presidente Piñera.
Este martes el Congreso rindió su cuarta cuenta pública, liderada por la diputada Maya Fernández y el Senador Carlos Montes.
La presidenta de la Cámara de Diputados, Maya Fernández, se refirió a la labor legislativa señalando que “la unidad y los acuerdos son posibles en esta casa de la democracia”.
“Reafirmo el valor que tiene para nuestro sistema democrático que las relaciones entre los poderes del Estado sean institucionales, transparentes y de cara al país”, dijo la diputada.
Y agregó: “Siento un sincero orgullo por la labor que esta Cámara desarrolla, por el arduo trabajo que realizan todos y todas sus integrantes, en especial los funcionarios y funcionarias que laboran en ella”.
Montes, en tato, criticó que “el actual gobierno ha tardado algún tiempo en organizar e impulsar su agenda central”.
AGENDA FEMINISTA
Fernández comenzó su discurso destacando la necesidad de avanzar en la lucha contra los abusos hacia las mujeres: “Todavía no tomamos conciencia que la violencia contra las mujeres adopta múltiples formas y que todas ellas deben ser erradicadas de nuestra sociedad”.
En esa línea se refirió a la educación no sexista, el trabajo de la comisión de género y equidad de género y los proyectos relativos a los derechos de las mujeres.
El presidente del Senado, en tanto, señaló: “Miro con optimismo los nuevos movimientos sociales, como la llamada ‘ola feminista’. Es un cambio cultural que trasciende la acción legislativa, y que expresa nuevas formas de ciudadanía y una democracia viva en la base social”.
DIETA PARLAMENTARIA
Montes se cuestionó: “¿Cuál es la remuneración justa de los parlamentarios? “, a lo que respondió: “Es un tema complejo, con el cual se puede hacer fácil populismo anti política, por eso invito a tratarlo con seriedad”.
“Es necesario despejar este tema de una vez y crear un sistema que fije los salarios no sólo de los parlamentarios, sino de otras altas autoridades del Estado, atendiendo la experiencia internacional de los países de la OECD”, agregó.