El Ministerio Público indaga las comunicaciones entre el exsubsecretario del Interior, Manuel Monsalve, y altos mandos de Carabineros, tras revelarse que el 16 de octubre, días antes de que se hiciera pública la denuncia por abuso sexual y violación en su contra, intercambió mensajes con el subdirector de la policía uniformada, Enrique Monrás.
La investigación contra el exsubsecretario del Interior, Manuel Monsalve, acusado de abuso sexual y violación por una exsubalterna, ha derivado en una nueva controversia: la posible participación de Carabineros en diligencias previas a la formalización de la denuncia ante la Fiscalía.
Uno de los puntos clave en este nuevo giro del caso es el acceso a las grabaciones de seguridad del Hotel Panamericano, donde presuntamente ocurrió el delito, lo que ha puesto en duda el actuar de la policía uniformada, que estaba bajo el mando de Monsalve.
De acuerdo con información recabada por The Clinic, la Fiscalía está investigando también las comunicaciones entre Monsalve y altos mandos de Carabineros.
El 16 de octubre, días antes de su renuncia, Monsalve intercambió mensajes con el subdirector de Carabineros, Enrique Monrás.
En esos mensajes, Monrás le escribió a Monsalve: “Subsecretario, buenas tardes, este es mi número, cualquier cosa que necesite me avisa… a la hora que sea.” A lo que Monsalve respondió: “Muchas gracias General.”
Ese mismo día, a las 12:09, la capitán Silvana Flores, enlace entre la Subsecretaría del Interior y Carabineros, informó a Monsalve sobre la disponibilidad de una avioneta institucional para trasladarlo desde la Región del Biobío a Santiago, después de haber informado a su familia sobre la denuncia en su contra.
Flores escribió: “Avión a su disposición me indica mi Grl Araya. Y todo lo que usted necesite también”.
Por otro lado, durante las diligencias realizadas por el fiscal regional Centro Norte, Xavier Armendáriz, surgieron testimonios que sugieren que Carabineros habría solicitado las grabaciones de las cámaras de seguridad del Hotel Panamericano antes de que la denuncia fuera formalizada ante la Fiscalía.
Según declaraciones de la Policía de Investigaciones (PDI) incluidas en el expediente, el administrador del hotel confirmó que personal de Carabineros ya había solicitado las grabaciones cuando los investigadores acudieron al lugar. Sin embargo, en un oficio fechado el 25 de octubre, Carabineros negó haber realizado diligencias en el hotel, en el restaurante o sus alrededores, luego de consultar a diversas unidades operativas.
Los funcionarios de la PDI indicaron que el administrador del hotel les explicó que Carabineros justificó la solicitud de las grabaciones como parte de una investigación en curso en el lugar, aunque no se especificó el motivo exacto de esa intervención.
La defensa del mandatario aseguró que él fue víctima de acoso sistemático por parte de la mujer que, 10 años después de enviados los mensajes, presentó la denuncia en su contra.
