En conversación con CNN Chile, Daniel Ibáñez, presidente de la agrupación y también miembro de la Mesa Técnica de la Sociedad Civil, aseguró que "no existió fue voluntad política para que las organizaciones civiles participaran de forma autónoma porque aquí hay claramente un interés del CNTV y de los partidos de resguardar el contenido".
La franja televisiva va tomando forma de cara al plebiscito que se realizará el próximo 26 de abril, y durante los últimos días se han resuelto algunos aspectos, como el orden en que van a aparecer quienes formen parte del espacio, mientras que el Tribunal Electoral (Tricel) se pronunció respecto a la participación de las organizaciones civiles.
En conversación con CNN Chile, Daniel Ibáñez, presidente de la Fundación Participa y miembro de la Mesa Técnica de la Sociedad Civil, se refirió a dicha resolución, que fue emitida a partir de un recurso presentado por este último organismo.
“Logramos revertir la medida inicial del CNTV (Consejo Nacional de Televisión) que excluía a la sociedad civil de este espacio, el Tricel nos dio la razón“, relató.
“Una nueva resolución del CNTV estableció que la sociedad civil debía someterse a la tutela de los partidos, quienes iban a tener que regular la forma de participación, pero además la limitó a aquellas organizaciones registradas de acuerdo a la Ley 20.500. Logramos revertir en la última reclamación que se incorporara a las organizaciones fuera de la ley 20.500, pero no logramos revertir la tutela de los partidos“, agregó.
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Consultado sobre los motivos por los que se ha generado este escenario, Ibáñez afirmó que “el CNTV es el que se ha complicado de alguna manera y hay varias formas de leer esto, pero principalmente, quienes conforman este consejo son personas representantes de los partidos tradicionales, bajo una lógica binominal, y lo que estamos haciendo en la sociedad civil al restarle un tercio de tiempo es algo que les incomoda más allá de lo que digan públicamente“.
Entre las principales críticas desde este sector a la franja se encuentran tres puntos: el primero tiene que ver con que existe una definición de quiénes participar o no que es discrecional de los partidos, el segundo con que estos definen los contenidos y, el tercero, con que además definen quiénes van a ser los voceros de las organizaciones.
Así lo indicó Ibáñez, quien dijo que “hacemos un llamado a los partidos para que actúen de verdad con responsabilidad y generosidad. Llamamos a los partidos a que entreguen este espacio para que las organizaciones puedan actuar con total libertad para manifestarse”.
En tanto, con respecto a cuál camino debió seguirse en su opinión, señaló que “fórmulas existían, lo que no existió fue voluntad política para que las organizaciones civiles participaran de forma autónoma porque aquí hay claramente un interés del CNTV y de los partidos de resguardar el contenido”.
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“Esta es una franja en que la participación de la sociedad civil va a ser demasiado regulada, más propia de una dictadura que de una democracia donde cualquiera pudiera expresar de acuerdo a la posición que va a defender”, continuó.
“Nosotros no estamos contra los partidos, entendemos que juegan un rol, pero la sociedad civil hoy día debe tener una relevancia distinta, más importante, porque si hoy estamos conversando e este proceso constituyente es justamente por la movilización de la ciudadanía y no por iniciativa de los partidos ni mucho menos del CNTV”, cerró.