CNN Chile accedió a cifras de Fiscalía Nacional y conversó con la subdirectora de Crimen Organizado de la misma institución y también con los municipios que presentan mayores casos de homicidios de menores de 18 años.
Era cerca de la media noche. A las cercanías de la avenida San Daniel con pasaje Huequén, en Pudahuel, llegó un vehículo con cuatro acompañantes, uno de ellos un menor de sólo 12 años.
Los ocupantes del automóvil se habrían trasladado al sector para poder comprar droga. Estaban en eso cuando, según información policial, un desconocido se acercó y, sin mediar provocación previa, ejecutó una serie de disparos hacia el interior del auto. Varias de esas balas impactaron el cuerpo del menor.
Pese a los esfuerzos de sus familiares, quienes lo trasladaron rápidamente hasta el Hospital Félix Bulnes, en Cerro Navia, el cuerpo del niño no resistió y falleció en dicho lugar.
Su muerte pasó a engrosar una lista que nadie quisiera que existiese. Una que refleja que en seis años (2018 a 2023) 131 niños, niñas y adolescentes han sido asesinados, ya sea por arma de fuego, cortopunzante u otro tipo (golpes, principalmente), en contextos asociados a delitos y/o grupos organizados.
CNN Chile accedió a cifras de Fiscalía Nacional, conversó con la subdirectora de Crimen Organizado de la misma institución y también con los municipios que presentan mayores casos de homicidios de niños, niñas y adolescentes.
Los datos del Ministerio Público revelan otra realidad. La mayoría de los homicidios de menores de edad se producen en comunas del sector norponiente de la capital, las que históricamente han estado más relegadas en materia económica.
De las 57 comunas de la Región Metropolitana, solo 37 han presentado víctimas de homicidios. En primer lugar se posiciona San Bernardo con 12 muertes; luego La Pintana (10); Santiago (8); Pudahuel (8) y Puente Alto (7).
En el mapa se evidencia que el sector oriente de la región no presenta mayores casos. La única excepción es Las Condes (3) y Lo Barnechea (1).
Foto referencial | Sebastián Rodríguez- Agencia Uno
Los mecanismos registrados desde Fiscalía se dividen en tres clasificaciones: armas de fuego, objeto cortante o punzante y otros. Sin embargo, el que más predomina es el uso de arma de fuego.
Tania Gajardo, subdirectora de Crimen Organizado de Fiscalía Nacional, explica que en estos dos últimos años el contexto de uso de arma de fuego aumentó significativamente: “Teníamos 8 homicidios de menores de edad con arma de fuego en 2018 versus 25 muertes en el 2023”. En otras palabras, aumentó tres veces el uso de armas de fuego en este tipo de homicidios a menores de 18 años.
Desde 2020 en Chile las armas de fuego pasaron a ser el principal mecanismo para cometer homicidios, según el informe de la Fiscalía que mide este tipo de delitos en la población en general. Es más, en el mismo informe (a nivel general de víctimas) hay una predominancia del contexto interpersonal que alcanza el 41,3%, seguida por los homicidios ocurridos en contexto asociado a delito y/o grupo organizado, que llegan al 36,9%.
Gajardo, explica que el uso de armas de fuego “pueden ser entre organizaciones, que pueden ser venganzas y no quiero decir que específicamente los niños hayan sido el blanco o los menores de edad hayan sido el blanco, pero sí de estos enfrentamientos, que es lo que hemos visto sobre todo el 2023, el enfrentamiento entre bandas o en homicidios por venganzas, también en contexto de organizaciones criminales, terminan muriendo menores de edad en este tipo de circunstancias”.
En esa línea, la subdirectora detalla que en los últimos 2 años el contexto fundamental ha sido porque “se dispara hacia adentro de las casas o hacia adentro del vehículo donde van niños con adultos o en la calle”.
―¿Qué se considera como “otros” en esta clasificación de mecanismos?
―Golpes, si tú estás como alguna situación de una riña y tú golpeas a alguien y por ese golpe que no sé, la persona puede caer mal, puede sufrir un traumatismo más grave y terminar muriendo, por ejemplo. Caben ahí todas las posibilidades que no son ni armas de fuego ni objeto corto punzante y la más frecuente son golpes de puño.
―¿Y qué rango etario se considera en estas cifras?
―Entre un rango etario de 0 a 14, esta diferencia se hace porque a los 14 años empieza la responsabilidad penal adolescente. Entonces, de 0 a 14 años, es un rango de edad y de 15 a 17 es otro rango de edad.
Bajo ese contexto, en 2022 murieron 49 menores de edad (0 a 17 años) y en 2023 aumentó significativamente en 18 personas más, con una tasa de 5,4%, es decir, 67 menores de edad.
Algunos municipios donde se registra la mayor cantidad de homicidios de menores de edad han mostrado su preocupación frente al tema. Del mismo modo, hacen un llamado al Gobierno a reforzar las medidas para evitar que este tipo de hechos siga en aumento.
Foto referencial | Diego Martin | Agencia UNO
El alcalde de San Bernardo, Christopher White (PS), se refirió a las cifras que comprometen a su comuna y respondió que esta situación la han venido denunciando como municipio hace más de 3 años, cuando asumieron la alcaldía: “No hemos visto una actitud de cambiar esta realidad con acciones concretas, un plan Calles sin violencia que no ha dado los resultados. Por eso fuimos a La Moneda de entregar una carta al Presidente Gabriel Boric para manifestarle nuestra preocupación, pero también le quiero plantear que, así como lo dijo con mucha claridad que los bancos tenían una actitud, coñete con el Gobierno, nosotros sentimos que el Gobierno ha tenido una actitud coñete con San Bernardo porque los delitos han aumentado, porque la gente de la comuna lo está pasando mal.
“Lamentablemente nuestras niñas y nuestros niños están secuestrados por el crimen organizado, específicamente por el narcotráfico”
El jefe comunal indicó que anunciarán un Plan de Deserción Escolar Cero “porque sabemos que la disputa está entre las bandas de narcotráfico y los colegios municipales, allí es donde tenemos que poner los esfuerzos”. También, expresa su molestia: “Necesitamos más herramientas, más recursos y por sobre todo convencer a los vecinos que denuncien porque ya tienen miedo, ¿y por qué tienen miedo? Porque los barrios más complicados, el que manda no es el Estado de Chile, es el crimen organizado y el narcotráfico y eso es lo que tenemos que cambiar. Esperamos que el Gobierno se haga presente en nuestra comuna”.
Desde la Municipalidad de La Pintana, la segunda comuna con más homicidios en la RM, Juan Olave, director de Seguridad Humana, se refirió a las 10 muertes que han enlutado a sus habitantes en los últimos años. Define la zona como un lugar “carente de servicios públicos y de esparcimiento, largas distancias a recorrer diariamente para asistir al trabajo, una alta tasa de desocupación, alta proporción de adultos mayores son víctimas de una violencia estructural propia de sectores conformados por olas de relocalización social, vías de ingreso comunal reducidas, alta tasa de desocupación y baja retención de jóvenes profesionales y/o técnicos”, entre otras.
―Según la información que tenemos, las comunas con mayores indicadores de pobreza son las que tienen más homicidios de menores en comparación a aquellas comunas del sector Oriente de la región, ¿cómo evalúa usted esta situación?
―Las condiciones socioeconómicas, por sí solas, no tienen relación directa con la ocurrencia de delitos, sino más bien, se puede argumentar que el sector nororiente de la capital se reconoce como un sector de alta renta donde se localiza el polo comercial y financiero de la ciudad, mientras tanto, en las comunas periféricas de la zona sur, su realidad es de marginación respecto a la dependencia de servicios en sectores céntricos. Estas características de índole urbana se entremezclan con las necesidades sociales de sus habitantes, a la vez que también propician un buen ambiente para la venta de drogas a población joven y a consumidores habituales de otro segmento etario. Se puede presumir, entonces, que esta realidad estructural que dista de la realidad de las comunas del sector nororiente, facilitan la ocurrencia de delitos asociados con el control territorial, para lo cual consideran necesario hacer uso de armas de fuego.
Por último, la municipalidad de Santiago respondió que “el homicidio de esos 8 NNA es preocupante, también la vulneración de sus derechos que rodean las circunstancias de este tipo de hechos. El Estado en su conjunto debe avanzar hacia una política de protección de NNA, en especial cuando son infractores de ley y a temprana edad comienzan a cometer delitos. Es un hecho que, a mayor nivel de vulneración de derechos, mayor es la probabilidad de tener conductas infractoras”.
―Respecto a datos de Fiscalía, el sector oriente no destaca con cifras mayores a 3 personas, ¿cuál es su percepción sobre esto?
― Santiago es una comuna capital y barrial del país, por lo tanto, los fenómenos sociales que ocurren como sociedad, como el caso del incremento de la violencia, se ve reflejado en el territorio. Las desigualdades históricamente se han reflejado en el fenómeno delictual. Y esta no es la excepción.
Las actividades están enmarcadas en el lema "Salgamos a jugar", por lo que el énfasis estará en los juegos tradicionales y la "transmisión intergeneracional de la riqueza cultural". La jornada se realizará en 16 regiones del país.
