Instalarán inhibidores de señal en cárceles para evitar delitos: Medida está en período de prueba en tres penales

Por CNN Chile

25.03.2024 / 23:30

Si bien las autoridades no han entregado mayores detalles sobre la medida, se sabe que busca acabar con una práctica que las personas privadas de libertad llevan realizando hace años. Además, trabajan en medidas de prevención para "evitar cualquier tipo de inconveniente" vinculado a la resistencia por parte de los internos.


El Ministerio de Justicia confirmó la instalación de inhibidores de señal al interior de los recintos penitenciarios. Pese a que no se han dado de cómo se va a implementar, la medida ya estaría en etapa de prueba en tres recintos de la capital.

Y es que los clásicos cuentos del tío o estafas telefónicas son prácticas recurrentes desde los penales, y es eso lo que el Gobierno busca eliminar con la instalación de los inhbidores.

Así lo confirmó el ministro de Justicia, Luis Cordero: “La etapa de instalación de la primera fase está en etapa de desarrollo, de prueba. Y las licitaciones que vienen para los penales que siguen, también”.

Dicha etapa ya habría iniciado en Santiago 1, la ex Penitenciaria y el Recinto Penitenciario Especial de Alta Seguridad. Una tecnología inédita en América Latina que busca enfrentar una realidad que solo en 2023 dejó más de 26.000 celulares incautados a nivel nacional.

De acuerdo al presidente de la Asociación de Gendarmes, Pablo Jaque, se busca que la cifra baje “considerablemente para que definitivamente se terminen los actos delictivos que se cometen desde las unidades penales hacia el exterior utilizando un aparato celular”.

Janssen Albornoz, de la Asociación Nacional de Suboficiales de Gendarmería, comentó que una vez teniendo las antenas en buenas condiciones, los internos ya no podrán tener esa clase de contacto. “Desconozco la implementación por parte de Gendarmeria, pero tienen que tener en claro que una vez puestos los inhibidores, deberían haber cero celulares”.

De hecho, hace menos de una semana Gendarmería incautó 312 celulares y 277 armas blancas tras un allanamiento en Santiago 1. Por ello, ya se alerta que más de 1.200 bandas operan desde su interior.

El representante de la Asociación de Gendarmes comentó que actualmente no se dispone de recursos humanos suficientes para estar en todos los lugares de la cárcel. En ese sentido, el uso e incorporación de este tipo de tecnología “ayuda en materia de seguridad y evita que se sigan cometiendo delitos por estas bandas que siguen operando al interior de las cárceles”.

Internos se rehúsan a la instalación de inhibidores de señal

Si bien la medida ha sido valorada, también ha generado preocupación. Y es que tras el anuncio algunos reclusos habrían amenazado con posibles motines y tomas de rehenes a modo de protesta.

Así lo señaló Mario Benítez, de la Asociación de Oficiales Penitenciarios: “Hemos tenido conocimiento de posibles amenazas, lo que además debería verificarse. Cualquier medida que implique un mayor control y restricción a la población penal siempre tendrá resistencia”. 

En todo caso, Claudio Martínez, exdirector de Gendarmería, apeló a que en ese caso el Estado debería ser “intransable. No puede ceder ante una política pública, en este caso, por cuanto significa entrar a perder el control del recinto carcelario”.

“Sabemos que hay una situación que se puede venir y también necesitamos respaldo político de las entidades estatales de que cuando se actúe seamos respaldados como funcionarios en nuestra acción”, acotó Janssen Albornoz.

Por eso, desde el Ministerio de Justicia aseguraron que ya se han tomado acciones preventivas en los recintos carcelarios. De acuerdo al titular de la cartera, Gendarmería en coordinación con Carabineros “y otro tipo de instituciones vinculadas” han ido adoptando medidas de prevención “para evitar cualquier tipo de inconveniente”. 

Aunque por seguridad no se han dado mayores detalles de la puesta en marcha a nivel nacional, lo que sí se sabe es que la medida busca acabar con una práctica que por años han realizado quienes, pese a estar privados de libertad, siguen cometiendo ilícitos.