La ministra de la Mujer y Equidad de Género señaló que "es importante reiterarle a la ciudadanía que el femicidio es un delito particular, no es cualquier homicidio. Está originado en una relación y en una percepción del femicida de que es dueño de su víctima, y cuando su víctima decide poner fin a una relación e iniciar una vida nueva, él tiene derecho a poner fin a esa vida porque pierde el control",
El ataque que sufrió en Pudahuel una joven de 17 años, quien fue apuñalada 20 veces por su ex pololo de 19, y el femicidio de una mujer a disparos de escopeta por parte de su ex pareja en la comuna de Coltauco (Región de O’Higgins) han reavidado el debate en torno a la violencia de género en el país.
Así lo manifestó la ministra de la Mujer y Equidad de Género, Isabel Plá, quien en conversación con 24 Horas explicó que el caso de Coltauco se convirtió en la víctima de femicidio número 34 en lo que va del año en el país de acuerdo al conteo de dicha cartera.
“Es importante reiterarle a la ciudadanía que el femicidio es un delito particular, no es cualquier homicidio. Está originado en una relación y en una percepción del femicida de que es dueño de su víctima, y cuando su víctima decide poner fin a una relación e iniciar una vida nueva, él tiene derecho a poner fin a esa vida porque pierde el control“, recalcó Plá.
En la misma línea indicó que “mucho más que lamentar lo ocurrido, es que tengamos claro que estamos frente a un delito que tiene características particulares y que es muy importante tomar conciencia de él”.
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La ministra señaló que en el caso del ataque en Pudahuel, el agresor será formalizado “probablemente por un homicidio calificado frustrado” y, de este modo, “arriesga como mínimo 10 años de cárcel y puede tener una pena que supere los 20 años”.
En tanto, en el caso de Coltauco, el atacante estaba con reclusión nocturna y pohibición de acercarse a la víctima, por lo que la autoridad señaló que “nuestro país necesita un sistema moderno para monitorear medidas cautelares en caso de extrema amenaza como en este caso y en eso estamos trabajando con el Ministerio de Justicia”.
“Estamos avanzando rápidamente, tenemos un desafío en esa materia que no es lo digital, sino que asegurarnos que el sistema tiene la capacidad de responder cuando está esa alarma. Vamos a cumplir con ese compromiso”, indicó.
Pero la ministra insistió en que, más allá de eso, “el agresor, el femicida, está dispuesto a todo, le da lo mismo ir a la cárcel, tener una medida cautelar, cerca del 50% de los femicidas se suicida. Él se ha puesto un propósito que es vengarse, demostrarle a la sociedad que él tiene el control respecto de la vida de esa mujer y está dispuesto a cualquier cosa“.
Finalmente recalcó que “siempre denunciar o pedir ayuda va a ser el mejor camino” e hizo un llamado a que el entorno de las víctimas también asuma un rol en dar a conocer este tipo de situaciones.
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Las autoridades advierten que el número de fallecidos podría aumentar, dado que aún hay muchas personas desaparecidas y las condiciones complicadas para la búsqueda.
