El juicio en su contra fue suspendido condicionalmente a petición de la querellante Valentina Henríquez, con lo que ahora Camilo Castaldi deberá cumplir una orden de alejamiento por dos años y hacer un curso a niños en riesgo social.
El 1 de julio de 2017, Valentina Henríquez, una joven de 23 años, difundió una serie de fotos donde se le veía con su rostro moreteado, heridas que atribuyó a una golpiza que le habría propinado “Tea Time“, como era conocido Camilo Castaldi hasta antes de ser expulsado de Los Tetas.
Desde ese momento comenzó un juicio que tuvo un punto aparte el viernes 17 de agosto, donde se le ordenó mantenerse alejado de Valentina por dos años, fijar un domicilio -avisar al tribunal si se cambia de casa- y realizar un taller de música a niños y niñas de un colegio en riesgo social.
Esto, pues el 7vo. Juzgado de Garantía declaró la suspensión condicional del proceso a petición de la demandante, Valentina. Por su parte, “Tea Time” decidió allanarse a un acuerdo para resolver cuanto antes este juicio.
Tras esto, Castaldi será sobreseído definitivamente, poniéndole punto final a esta historia. Sin embargo, “Tea Time”, quien vive hoy con su madre en un edificio, donde barre los pasillos y saca la basura por $100 mil mensuales, señala que lo más complejo ha sido “sobrellevar el juicio público”.
“Hay algo que olvida el feminismo con sus funas públicas sin esperar los procesos. Yo me quedé sin pega, pero un niño de 6 años se quedó sin manutención“, declaró a La Tercera.
Días después que Valentina publicó las imágenes en Facebook, la entonces presidenta Michelle Bachelet, habló sobre el caso en que se vio involucrado Castaldi. “Valentina se atrevió a mostrar sus heridas, sus golpes, y denunciar el infierno que estaba viviendo porque quería poner fin a su sufrimiento”, señaló la ex mandataria el 5 de julio de 2017.
“Hasta la primera autoridad del país hablaba de mí, sin siquiera saber mi versión de lo sucedido. Yo entendí que eso estaba mal, me parece que fue irresponsable“, comentó el músico.
Según explicó él mismo, el episodio sucedió una semana antes de ser denunciado: “En el caso del ojo (que se veía moreteado en las imágenes) ella estaba completamente descontrolada y estaba rompiendo el estudio de música. Yo estaba whatsappeando con el celular en la mano, me abalanzo sobre ella para detenerla y la golpeo involuntariamente con mi celular en la sien, eso le genera el ojo morado. No fue a propósito, sino un terrible accidente, aunque asumo que si hubiera manejado la situación de otra forma se habría evitado“.
Además, Camilo asegura que este fue el único episodio de este tipo: “El día que me toman preso lo único que ocurrió es que al terminar la relación con ella la saqué de mi casa y ella reunió fotos que guardaba de todo su historial de moretones. De las otras fotos no me puedo hacer cargo, algunas son moretones de cuando yo la bajaba cuando se subía a la ventana y amenazaba con suicidarse. Otras corresponden a lesiones en las que yo no tuve nada que ver, que se explican por sus problemas y que comprobé en la carpeta de investigación”.
Actualmente, Castaldi busca dejar atrás el juicio que duró cerca de 13 meses, y así volver a la música, esta vez con el apodo de “El Muerto”, además de un par de libros que está escribiendo: una ficción y una autobiografía.