En agosto podría ser despachado el proyecto, según las estimaciones del oficialismo.
En agosto podría ser despachado el proyecto, según las estimaciones del oficialismo.
A segundo trámite legislativo en el Senado pasó el proyecto de reforma tributaria del Gobierno. Esto luego que la Cámara de Diputados aprobara, en dos extensas jornadas, el texto legal.
Uno de los temas que más controversia generó en el hemiciclo fue el debate del artículo uno, que elimina el FUT y aumenta el impuesto de primera categoría a un 25%.
Ante la discusión que se llevará a cabo en la Cámara Alta, diversos senadores ya han marcado sus posturas. El senador Andrés Allamand (RN) aseveró que el corazón de la reforma puede ser más flexible, mientras que Ricardo Lagos Weber (PPD) recalcó que ese foco es que los impuestos sean pagados por las utilidades generadas y no las retiradas.
Juan Antonio Coloma (UDI) aseguró que hasta ahora existe una “inflexibilidad” yrecalcó que espera que exista un cambio de actitud en el Senado, para no persistir con lo que denominó como “una mala reforma”. En tanto, Allamand recalcó que es probable que coincidirán en elementos que planteará la DC, mientras que Ignacio Walker, presidente de la falange, aseguró que el corazón del proyecto “está a salvo” y la gran interrogante es qué mecanismo se implementará para sustituir al FUT.
La defensa del mandatario aseguró que él fue víctima de acoso sistemático por parte de la mujer que, 10 años después de enviados los mensajes, presentó la denuncia en su contra.
