Carabineros ha argumentado que los disparos que realizó el sargento Juan Guillermo González y que mataron al malabarista Francisco Martínez fueron en legítima defensa. El concepto está definido en el Código Penal y, en la investigación, la justicia deberá determinar si se cumple o no alguna de las tres condicionantes. Entre ellas se encuentran la agresión legítima, necesidad racional del medio empleado por parte de la persona que se está defendiendo y que exista una falta de provocación suficiente por parte de quien se defiende. Esto genera opiniones divididas entre los expertos Mauricio Daza, Carlos Gajardo y Sydney Houston. Para algunos, ellas no se cumplirían por lo que sería difícil eximir de la responsabilidad al autor de los disparos, mientras que para otros los sables que portaba el malabarista podrían ser un justificativo.