"Llegan al extremo de forzarte hasta un trastorno alimenticio", afirmó la danesa.
La modelo danesa, Ulirikke Hoyer, publicó a través de su perfil de Instagram y en un largo alegato publicado en su perfil de Facebook, que la marca la rechazó por que era “demasiado grande” o “demasiado gorda” (“too big” es la frase que ella utiliza).
Hoyer, quien anteriormente se dedicaba a ser tenista profesional, en los dos últimos años ha desfilado para Louis Vuitton, Valentino, Versace, Hugo Boss, John Galliano, Elie Saab y ha protagonizado editoriales para W Magazine o Vogue Paris.
El recién pasado 13 de mayo, la joven voló hasta Kioto, Japón, para participar del desfile crucero de Louis Vuitton que tuvo lugar en un precioso bosque de esa localidad, en el Museo Miho, y que congregó a cientos de rostros conocidos del mundo de la moda. Sin embargo, Hoyer no pudo participar, ya que la rechazaron en el casting en Tokio. El motivo: ser “demasiado grande”.
La modelo ha querido contarlo en su cuenta de Instagram, donde ha recibido más de 35.000 me gusta en menos de 24 horas y unos 2.400 comentarios, en general de apoyo.
Traducción: Acabo de volver de Tokio, donde Louis Vuitton ha realizado un bello desfile de crucero en Kioto, solo que nunca llegué a Kioto porque cancelaron mi participación debido a que estoy “demasiado gorda” (tengo una talla 34-36).
Alexia, la agente de casting de Ashley Browak [una potente directora de casting en el mundo de la moda] me dijo que hubo problemas durante las pruebas. Según ella, tengo “una tripa muy hinchada”, “la cara hinchada” y me instaron a que me matara de hambre a mí misma con esta frase: “Ulrikke tiene que beber solamente agua durante las próximas 24 horas”. Me quedé en shock cuando lo escuché.
Me levanté a las dos de la mañana y tenía muchísima hambre. El desayuno empezaba a las 6:30, y yo comí lo mínimo. Tenía miedo de encontrarme con Alexia, pero por suerte no llegó hasta las ocho, cuando ya se habían llevado el plato de la mesa. Nos saludó con un ‘buenos días’ a mí y a las otras chicas y luego me miró, miró hacia abajo hacia mi no existente plato y me volvió a mirar. Estaba comprobando si había comido algo.
A las siete de la tarde mi agencia base me llamó desde Dinamarca para darme malas noticias y contarme que Louis Vuitton había decidido cancelar mi participación en el desfile sin hacer la segunda prueba y que me mandaban de vuelta a casa. No solo tenía barriga y mi cara estaba inflada, ahora mi espalda también era un problema.
Me alegro de tener 20 años y una trayectoria en deportes de élite y no ser una chica de 15 años, que son nuevas en esto y no tienen seguridad en sí mismas, porque no me cabe duda de que habría acabado muy enferma y arrastraría muchas cicatrices en mi vida adulta.
Hoyer mide 1,78 de altura y sus medidas son 79 de pecho, 61 de cintura y 86 de caderas, por los datos de su ficha profesional (91,5 de caderas, según lo medido recientemente por su agencia en Dinamarca). Tiene una talla 34 o 36.