El ministro de Salud defendió el funcionamiento del sistema de trasplantes en el país, que calificó como "muy sólido", y explicó que en la situación ocurrida en Temuco, los órganos no pudieron ser trasladados "porque el paciente había entrado a pabellón para la extracción de los dos riñones como se había acordado".
Este lunes el ministro de Salud, Jaime Mañalich, se refirió a los cuestionamientos que ha recibido la cartera a partir del caso de Joaquín Bustos, el joven que murió en Temuco y cuyos órganos no pudieron ser trasladados para ser donados.
El caso se conoció gracias al testimonio de Marcela Palma, la madre del joven de 24 años, quien denunció que el procedimiento no pudo llevarse a cabo debido a falta de disponibilidad de un avión de la FACh. Sin embargo, desde la institución afirmaron esta mañana que sí dispusieron del vehículo aéreo pero que el viaje fue cancelado por el Minsal.
“Cabe destacar que por convenio existente, con el Ministerio de Salud, la Fuerza Aérea es requerida para el transporte de órganos cuando las empresas aéreas privadas nacionales no tienen la capacidad para prestar el servicio correspondiente. En este caso, la Fach, apenas fue notificada, estuvo disponible para realizar el vuelo”, dijeron a través de un comunicado.
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Mañalich negó que se haya cometido algún tipo de negligencia o que existan responsabilidades individuales luego de lo sucedido y defendió el funcionamiento del sistema de trasplantes en el país.
“La FACh dijo que tenía disponible (una nave) para una hora y media después. Y cuando llamé a la Clínica Alemana de Temuco para avisar a esto –yo llamé personalmente– el doctor me manifestó que ya no se podía demorar la situación porque el paciente había entrado a pabellón para la extracción de los dos riñones como se había acordado”, explicó.
Además, señaló que “en el caso de un corazón, pulmón o hígado, no puede pasar más de tres horas de espera desde que es extraído, de lo contrario el órganos no servirá”.
Por otra parte, Mañalich explicó que “lograr que el 100% de los órganos se trasplanten y logren su objetivo es una tarea muy difícil”, y de todos modos explicó que de los órganos del joven de 27 años se pudieron utilizar sus riñones, lo que permitió salvar “dos vidas”.
Además detalló que en Chile “tenemos un 7% de pérdidas de órganos por términos logísticos, ese número se compara relativamente bien con las cifras internacionales”. Como ejemplo mencionó el caso de España, líder mundial en trasplante de órganos, donde la cifra corresponde a un 4%.
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En la misma línea, defendió el sistema de trasplante en Chile, que calificó como “muy sólido” y aseguró que en este caso no considera que haya una negligencia ya que “en cualquier parte del mundo se pierden órganos por términos logísticos”.
Finalmente, el ministro indicó que es esencial “generar centros multiorgánicos descentralizados. No podemos depender de lo que ocurra en Santiago”.
Las autoridades advierten que el número de fallecidos podría aumentar, dado que aún hay muchas personas desaparecidas y las condiciones complicadas para la búsqueda.
