El ex jefe de la DINA cumplía condenas otorgadas por la Corte Suprema, las que superaba los 500 años por casos de violaciones a los derechos humanos.
El ex jefe de la DINA cumplía las condenas otorgadas por la Corte Suprema, las que superaba los 500 años por casos de violaciones a los derechos humanos.
A los 86 años murió Manuel Contreras Sepúlveda, el ex jefe de la Dirección de Inteligencia Nacional (DINA), quien acumulaba más de 500 años de condena por su participación en delitos de violación a los derechos humanos durante la dictadura encabezada por Augusto Pinochet.
Trasladado al Hospital Militar por su deterioro de salud, lugar en el que se le retiró su tratamiento de diálisis, el ex militar estaba condenado a cadena perpetua y era uno de los hombres claves de la dictadura, siendo la cabeza en las actividades de represión política que incluyeron torturas, secuestros y asesinatos.
En entrevista con CNN Chile, Contreras aseguró que los militares actuaron como “garantes de la Constitución”, justificó su accionar durante el régimen al afirmar que “defendió al pueblo de Chile” y sostuvo que Augusto Pinochet conocía lo que hacía la DINA, ya que el organismo de policía secreta dependía del fallecido ex General del Ejército.
También desmintió los datos del informe Valech y el informe Rettig, afirmando que “no existen los detenidos desaparecidos”, ya que todas las personas “murieron en combate”. A raíz de las repercusiones de esa entrevista, se cerró el Penal Cordillera recinto en el que Manuel Contreras estaba recluido con múltiples beneficios catalogados de “lujo”, en comparación a lo que vive el resto de la población penal en Chile.
Manuel Contreras ya había cumplido las condenas por el homicidio calificado de Orlando Letelier y múltiples secuestros, que incluyeron a Ofelio Lazo Lazo, Sergio Lagos Marín, Enrique Jeria Silva, Darío Miranda Godoy y Jorge Solovera Gallardo. Actualmente se encontraba cumpliendo penas por el Plan Leopardo, que incluyó secuestros con homicidio, el caso Tejas Verdes y el denominado caso de Los Ocho de Valparaíso, entre otros.
desde la cúpula comunista, acusaron a la gestión del nuevo alcalde de Santiago, Mario Desbordes de "detener y afectar" el permiso para la realización del evento que estaba programado para el 4 y 5 de enero de 2025 en el Parque O'Higgins.