Ministro Cordero: “Hay aproximadamente 1.600 personas condenadas que no se han presentado a cumplir condena”

Por CNN Chile

29.03.2023 / 12:20

El titular del Ministerio de Justicia agregó que entre 2021 y 2023 se fugaron 32 personas de recintos penitenciarios, de los que se han capturado 8.


Autoridades del país asistieron este miércoles a la reapertura de la Cárcel de Alta Seguridad (CAS). En la cita estuvo presente el ministro de Justicia, Luis Cordero, quien comentó la situación actual del Registro Nacional de Prófugos, esto luego que Chile Vamos presentara un proyecto para que dicha lista sea pública.

El jefe de cartera explicó que la lista contempla, entre sus más de 31 mil casos, 28 mil que corresponden a incidencias de rebeldía procesal, es decir, gente que no compareció en alguna audiencia y, por ende, el tribunal indicó su detención.

De esa forma, enfatizó en que hoy existen cerca de 1.600 personas en el país con órdenes de detención pendientes, que no se han presentado a cumplir su condena y que deberían estar en presidio.

“Los números más significativos están asociados a otro tipo, que son aproximadamente 1.600 personas que han sido personas condenadas y que no se han presentado a cumplir condena”, aseveró el ministro.

El ministro aclaró que “no debemos confundir la lista —Registro Nacional de Prófugos— con la cantidad de gente que se ha fugado de las cárceles, no hay 30 mil fugados”.

“Cuando se suma a las personas que están sin ingresar a recintos penitenciarios, aquellos que se han fugado de cárceles y los que han incumplido su libertad condicional, aproximadamente podemos llegar a ese número -31 mil-”, finalizó Cordero.

El secretario de Estado agregó que entre 2021 y 2023 se fugaron 32 personas de recintos penitenciarios, de ellos se han capturado 8 y todos los que han intentado escapar desde ese entones han sido detenidos.

Finalmente, Cordero indicó que todo lo que sucede fuera de los centros penitenciarios genera una red de coordinación que está a cargo, principalmente, de las policías. En esa línea, explicó que “debiéramos buscar mecanismos de integración que ya no dependan de Gendarmería, sino que fundamentalmente del sistema de orden público y de las policías”.