Agrupaciones de derechos humanos habían exigido la expulsión y degradación de los coroneles involucrados en el acto, sin embargo, el Gobierno respaldó las medidas adoptadas por el Ejército.
El Gobierno respaldó la decisión del Ejército, que el lunes llamó a retiro al director de la escuela Militar, Germán Villarroel Opazo, y al coronel Miguel Krassnoff Bassa, hijo del ex agente de la DINA, Miguel Krassnoff, por el polémico homenaje que se viralizó durante el fin de semana.
El ministro del Interior, Andrés Chadwick, señaló que “compartimos la decisión que ha tomado el Ejército” porque el homenaje no va en la línea de la doctrina de la institución.
Su par de la cartera de Defensa, Alberto Espina, afirmó que el “Ejército no debe ser jamás usado para actividades que no digan relación con los valores y principios que representa”.
“No es correcto que en un recinto como las Fuerzas Armadas, se destaque a un ex oficial que está condenado por delitos gravísimos”, agregó.
Al igual que Chadwick, dijo que la medida adoptada por el Ejército le parece “justa, adecuada y significa nada menos que oficiales que tienen 30 años de actividad, como el director de la Escuela, es muy duro que se le pida la renuncia y tenga que retirarse”.
También respondió a los emplazamientos de agrupaciones de derechos humanos, que exigen la expulsión y degradación de rango de ambos coroneles.
“Eso solo es posible en virtud de una sentencia condenatoria de acuerdo al Código de Justicia Militar, y en este caso no hay sentencia porque no hay un delito”, indicó.
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Experto en política estadounidense y ex subsecretario de Asuntos Hemisféricos de EE.UU., el cientista político chileno analiza las elecciones presidenciales y su impacto en la relación de EE.UU. con América Latina.
