La administración viñamarina ha visto mermados sus ingresos durante la pandemia, especialmente por dejar de recibir el aporte del Casino Municipal, el cual se encuentra cerrado hace casi seis meses. Ahora deberá solicitar este dinero para cubrir los gastos.
(Agencia UNO) – Los efectos económicos del COVID-19 se han hecho sentir fuertemente en las finanzas de la Municipalidad de Viña del Mar, situación que también fue recogida en el Informe Presupuestario del 2do. Trimestre, de la misma dirección municipal, que señala un déficit de $9.082 al 30 de junio.
Entre las principales causas de dicha situación se cuenta el cierre, por decisión de la autoridad sanitaria, de casi 6 meses del Casino Municipal, cuyo aporte económico representa más de un 30% del presupuesto anual del municipio.
A la fecha, el recinto ha dejado de aportar $2 mil millones mensuales, lo que totaliza $10 mil millones de menores ingresos a la fecha para la ciudad.
A lo anterior, se suma la caída de otros ítems, como pagos de derechos municipales y la paralización de otras concesiones, principalmente el Rodoviario y de los hoteles O’Higgins y Miramar, proyectándose un déficit de más $13 mil millones a diciembre de este año.
Debido a la situación, la alcaldesa Virginia Reginato ha realizado una serie de gestiones a través de oficios dirigidos al Presidente Sebastián Piñera, al ministro de Hacienda, Ignacio Briones, y en reuniones con el subsecretario de Hacienda, Francisco Moreno, y el subsecretario de Desarrollo Regional Administrativo, Juan Manuel Masferrer, con el propósito de exponer la situación financiera del municipio viñamarino y solicitar la ayuda correspondiente.
Si bien las alternativas de solución están avanzando, ellas no se podrán concretar en el corto plazo, en el mejor de los casos las soluciones serán para el primer semestre del 2021.
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Por dicha razón, la alcaldesa propondrá al Concejo Municipal, aumentar a $9.500 millones el leaseback ya aprobado por los concejales por $2.500 millones para pagar el Bono SAE de los profesores de la Corporación Municipal, a fin de cubrir las nuevas necesidades económicas del municipio debido a la contingencia sanitaria, suma que deberá ser autorizada por el Ministerio de Hacienda.
Reginato afirmó que “la pandemia nos ha afectado a todos y de muchas maneras, primero a la salud y también ha precarizado la economía del mundo, del país, de la región, de las principales actividades de la economía local y de las familias”.
“La municipalidad no ha sido la excepción, todas sus unidades han sido exigidas al máximo estos últimos meses, y como tantas entidades públicas y privadas, hemos tenido más gastos y menos ingresos viéndonos obligados a recurrir al endeudamiento”, agregó.
En la misma línea, precisó que este préstamo “nos permite afrontar las necesidades actuales sin comprometer la gestión futura porque su estructura de garantías y pagos está perfectamente evaluada por organismos técnicos”.
La jefa comunal aseguró que “todavía quedan meses difíciles y las familias viñamarinas necesitan y merecen un municipio con todas sus capacidades desplegadas así que espero que el leaseback sea apoyado por el Concejo Municipal”.