La nueva audiencia de los uniformados, imputados por torturas contra Moisés Órdenes, está agendada para el 3 de abril en el Octavo Juzgado de Garantía de Santiago.
VIDEO RELACIONADO – Patricio Bao cuenta cómo fue su detención (09:15)
Los carabineros imputados por la golpiza contra un hombre en Plaza de Ñuñoa, durante el toque de queda el 21 de octubre de 2019, serán reformalizados por dos nuevos delitos.
Así lo solicito la Fiscalía Oriente, con el objetivo de que los 12 uniformados sean formalizados por obstrucción a la investigación y falsificación de instrumento público. Esto, debido a que los carabineros habrían falsificado el parte policial en el que se justificaba la detención.
La nueva audiencia de los funcionarios de Carabineros está agendada para el 3 de abril en el Octavo Juzgado de Garantía de Santiago.
Al respecto, el abogado de los uniformados, Mario Vargas, sostuvo que “es una decisión equivoca, estos mismos antecedentes los tuvo el Ministerio Público al momento de solicitar la prisión preventiva”.
Junto a esto, añadió que va a “solicitar el sobreseimiento definitivo en relación a los nuevos delitos que imputará la fiscalía entendiendo que dichos delitos no existen”.
Todo ocurrió la noche del lunes tras el 18 de octubre, momento en que Moisés Órdenes se manifestaba en Plaza de Ñuñoa tras el toque de queda. En ese lugar, el grupo de carabineros de Fuerzas Especiales lo golpeó con lumas y patadas. Cuando cayó al suelo producto de los golpes, ellos lo siguieron agrediendo.
Toda la situación fue captada en vivo por las cámaras de CNN Chile y CHV Noticias.
Inicialmente eran 12 los carabineros formalizados por torturas, sin embargo, en enero, el Octavo Juzgado de Garantía de Santiago determinó sobreseer a siete de ellos, ya que estuvieron en el lugar, pero no golpearon a Órdenes.
Tras los golpes, Moisés Órdenes perdió la visión de un ojo y quedó con diversas lesiones en varias parte de su cuerpo.
El conductor de CNN Chile Radio habló en la sección Cuestión de Opinión sobre las descalificaciones del mandatario argentino al presidente Gabriel Boric. "No responder con otro insulto es optar por la empatía y la posibilidad de entendimiento. Es una elección que cierto, es difícil. Habla, sin embargo, de la mejor versión de quienes somos y de quienes queremos ser", comentó.