Pistolas Taser: La propuesta de Orrego para combatir la delincuencia que el INDH y la Defensoría de la Niñez rechazaron tajantemente

Por Valentina Sánchez Cárdenas

05.07.2024 / 11:37

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Carabineros obtuvo las armas de electrochoque en 2019, pero no han sido utilizadas porque no cuentan con un protocolo para ello. El tema volvió a instalarse en la palestra luego de que el gobernador lo propusiera al gobierno.


A fines de junio el gobernador de la Región Metropolitana, Claudio Orrego, se reunió en La Moneda con el subsecretario del Interior, Manuel Monsalve, para proponer, entre otras cosas, avanzar en el uso de dispositivos no letales, como las pistolas Taser en Carabineros y Gendarmería.

En esa oportunidad, Orrego dijo que presentaron ante el gobierno “una propuesta de manual de uso de pistolas Taser para implementarlas, porque creemos que el marco legal actual, permite y faculta a Carabineros que ya adquirió 30 de estas pistolas y que no las puede todavía utilizar, a implementarlas para combatir el delito, pero, sobre todo, poder proteger a los agentes de seguridad de nuestro país”. Además, dijo que el Gobierno había dado luz verde al uso de dichas herramientas.

Este miércoles, durante una sesión de la Comisión de Seguridad Ciudadana de la Cámara de Diputadas y Diputados, la ministra Carolina Tohá (Interior), dio a conocer que el Ejecutivo está recién analizando la idea de poner en práctica el uso de las mencionadas pistolas, que fueron adquiridas en 2019 por Carabineros pero no han sido usadas por falta de un protocolo.

“Es un medio específicamente usado para causar dolor”

La idea, en todo caso, generó rechazo en años anteriores. En 2021 la institución policial ofició al Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH) y a la Defensoría de la Niñez para conocer su opinión sobre el uso de las Taser.

Pistolas Taser/Foto: @taserdefense

Pistolas Taser/Foto: @taserdefense

El INDH -que en ese tiempo era comandado por Sergio Micco– respondió que no estaban capacitados para “emitir una opinión técnica sobre los distintos tipos de armamentos”, y que si bien las pistolas evitarían el uso de armamento letal, no eran “inocuas”.

“A pesar de su menor letalidad en comparación a otras armas (sobre todo las de fuego), su uso necesariamente genera efectos, que consisten en lesiones por electroshock, incrustación de los arpones, dolor muscular, imposibilidad de respirar durante el tiempo que dure la descarga, y posibles efectos más severos en razón de determinadas condiciones de la persona sometida a la descarga (niños, embarazadas, tercera edad, personas con epilepsia o problemas cardíacos o bajo efectos de alcohol y droga)”, señaló.

También advirtió que desde el punto de vista de los derechos humanos, la mayor preocupación de la aprobación del uso de estas armas “está dada por el hecho de que se trata de un medio específicamente utilizado para causar dolor. Cualquier exceso o abuso en la utilización de este dispositivo podría ser en principio constitutivo de tortura, apremios ilegítimos y otros malos tratos”.

En ese sentido, el organismo indicó que en caso de aprobarse el uso de las Taser, fuera bajo un protocolo que se ajustara a las especificaciones y criterios “señalados por los informes técnicos y la normativa internacional más reciente”.

Usadas de “forma indiscriminada”

En esa misma línea, Patricia Muñoz, que en esa época lideraba la Defensoría de la Niñez, manifestó que en el caso de Chile fueron usadas “de forma indiscriminada” durante el estallido social, “sin considerar ninguna de las situaciones “que los propios protocolos consignaban (concretamente, en lo referido a la escopeta antidisturbios, carro lanza gases, entre otros)”.

Ello da cuenta que “su uso en algún caso ha sido el último recurso a utilizar por parte de la fuerza policial y que, como consecuencia de aquello, se ha generado una violación grave de los derechos humanos de niños, niñas y adolescentes, quienes difícilmente puedan provocar una amenaza o una agresión letal a un funcionario policial que se encuentra, presuntamente, preparado y equipado para enfrentar manifestaciones públicas”.

En ese sentido, la Defensoría apela a que el uso de estas “armas menos letales”, y en particular los dispositivos electrónicos de inmovilización temporal, deben estar enmarcadas en el Código de Conducta, “que dispone que el uso de la fuerza policial solo se puede aplicar en ‘caso estrictamente necesario y en la medida que lo requiere el desempeño de sus tarea’ (OHCHR, 1979, art. 3), enfatizando que el uso de la fuerza debe ser excepcional y aplicada en los casos en que razonablemente sea necesario (OHCHR, 1979, art. 3.a)”.

¿Cómo funcionan las pistolas Taser?

Las pistolas Taser (llamadas así por Thomas A. Swift’s Electric Rifle) son armas de electrochoque que al ser usada sobre una persona, la incapacitan temporalmente. De acuerdo a CNN Español, las descargas eléctricas producidas pueden alcanzar los 11 metros y causan una sensación paralizante, dolor intenso, contracciones incontrolables en los músculos.

Las Taser disparan dardos electrificados, pero también pueden ser presionadas directamente contra el cuerpo de la persona para inmovilizarla. Los dardos pueden o no penetrar la piel, según el fabricante.

Si bien son utilizadas para combatir la delincuencia, pueden llegar a ser mortales. Expertos médicos han afirmado que si una persona recibe una descarga de un dardo cerca del pecho, es probable que tenga un aumento “dramático” en su ritmo cardiaco. Por ejemplo, si alguien en reposo tiene desde 72 latidos por minuto podría llegar hasta 220 latidos por minuto tras la descarga.