El plan contempla una inversión de $1.200 millones en la Región Metropolitana para restaurar los semáforos que resultaron dañados en las últimas semanas.
A través de un convenio entre los ministerios de Transporte y Vivienda, junto a la Intendencia Metropolitana y las gobernaciones de las regiones que se vieron afectadas por daños, se llevará a un cabo un plan para recuperar los semáforos que quedaron inutilizables
La titular de Transportes, Gloria Hutt, explicó que con este convenio, “estamos priorizando 78 intersecciones críticas, principalmente en el eje Alameda y Vicuña Mackenna, donde necesitamos recuperar la fluidez del tráfico y la posibilidad de regular desde esta unidad operativa las ondas de luces verdes y rojas que nos permiten mejorar, por ejemplo, las velocidades”.
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La autoridad detalló que, a nivel nacional, hay cerca de 300 intersecciones sin semáforos funcionando, de los cuales 140 se encuentran en Santiago.
Esta iniciativa tendrá un costo de más de $1200 millones de pesos para reparar los daños en la Región Metropolitana, mientras que otros 900 millones de pesos serán utilizados para cubrir los daños que se produjeron en las regiones de Arica y Parinacota, Tarapacá, Antofagasta, Atacama, Coquimbo, O’Higgins, Bio-Bío y Los Lagos.
En una primera etapa, este plan de recuperación tendrá una duración de 70 días, en los que se contempla la restauración de las estructuras de semáforos, además de las fibras ópticas, cajas, entre otros detalles.
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Además, la ministra Hutt destacó que “dada la contingencia y la urgencia de recuperar el control en varias de las intersecciones más críticas, estamos abordando cuatro luminarias por intersección, en algunos casos hay 10 luminarias, vamos a partir con el movimiento básico”:
Para resguardar los semáforos que sean restaurados en los puntos críticos, el intendente de la Región Metropolitana, hizo un llamado a los vecinos a que puedan cuidar las estructuras. “Los vecinos pueden ayudar mucho en eso, aislando a los delincuentes, dejándolos solos (…) esto no es un espectáculo al cual concurramos para ir a mirar como si fuese una fiesta, es un acto delictivo”.