A horas de la votación en particular del proyecto que busca reducir la jornada laboral a 40 horas, el oficialismo espera impedir la votación a través de una acusación contra la presidenta de la Comisión de Trabajo, Gael Yeomans, por incumplir la obligación de tramitar los mensajes que el Ejecutivo tiene en suma urgencia.
Para las 14:30 horas está programada la votación en particular del proyecto impulsado por la diputada Camila Vallejo (PC) que busca rebajar la jornada laboral de 45 a 40 horas semanales en la Comisión del Trabajo de la Cámara.
Horas antes del inicio de este trámite legislativo, el ministro de Trabajo, Nicolás Monckeberg, se reunirá con diputados oficialistas para coordinar una ofensiva para impedir la votación de la iniciativa: se acusará a la presidenta de la Comisión de Trabajo, Gael Yeomans, por vulneración al reglamento de la Cámara.
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De acuerdo a fuentes consignadas por La Tercera, dicha acción sería por incumplir su obligación de tramitar los mensajes que el Ejecutivo tiene con suma urgencia, como es el proyecto de reforma laboral que moderniza la Dirección del Trabajo y el Sence, antes que avanzar con la moción parlamentaria.
Un informe encargado por los diputados Francisco Eguiguren (RN) y Patricio Melero (UDI) a la secretaría de la corporación, explica este punto: “Para las sesiones ordinarias debe respetarse el orden establecido en el artículo 265 del reglamento para conformar la tabla del orden del día de dichas sesiones”.
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“En caso de darse la circunstancia de que estén radicados en la comisión respectiva (…) uno o más proyectos con urgencia calificada de suma o discusión inmediata, dichos proyectos deben figurar en el primer lugar de la tabla“, advierte en documento, firmado por el secretario Miguel Landeros.
El diputado e integrante de la Comisión de Trabajo, Alejandro Santana (RN), precisó en el citado medio que “si la oposición insiste mañana (este lunes) en ver el proyecto del Partido Comunista, sería ir en contra del reglamento y la Ley Orgánica del Congreso. Y, por lo mismo, no tiene viabilidad que el proyecto siga siendo votado”.
Por su parte, Melero indicó que durante la sesión va a pedir “que se dé cuenta del informe del secretario de la Cámara en que señala que siempre y en todo evento tienen prioridad los proyectos que están calificados con urgencia por sobre los que no la tienen“.
En tanto, desde la oposición aseguran que Yeomans cuenta con la facultad de citar a una sesión especial mientras se avanza en el resto de las iniciativas en paralelo.
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El ministro Monckeberg tendrá la oportunidad de intervenir en la sesión de esta tarde. En la instancia, según señalaron fuentes del gobierno al matutino, el secretario de Estado espera presentar los detalles de un informe encargado a la Dirección de Presupuestos (Dipres), el cual sustenta el argumento que el proyecto de 40 horas irroga gasto fiscal, por lo que solo podría ser presentado por el Ejecutivo.