El servicio recepcionó más de un centenar de reclamos en contra de dos empresas dedicadas a la compraventa y comercialización de parcelas en distintas regiones del país, tales como Coquimbo, Valparaíso, O’Higgins y Maule.
El Servicio Nacional del Consumidor (Sernac) anunció la presentación de una denuncia por la posible comisión de delitos vinculados a la venta irregular de parcelas por parte de las empresas Agroparcelas Chile SpA e Inversiones Mundo SpA.
Desde el organismo tomaron la decisión tras haber recibido más de un centenar de reclamos en contra de las empresas dedicadas a la compraventa y comercialización de parcelas en distintas regiones del país, tales como Coquimbo, Valparaíso, O’Higgins y Maule.
Para desarrollar estas actividades, la empresa utilizó diversas sociedades y razones sociales, las que se encontraban comercialmente relacionadas, pudiendo compartir su representante legal o accionistas. Se trata de Agroparcelas Chile SpA (ex Inversiones Costa del Sol SpA) e Inversiones Mundo SpA (Mundo Parcelas).
Tras determinar su modelo de negocio y detectar la posible comisión de delitos por parte de los proveedores antes mencionados, es el que el servicio optó por presentar una denuncia ante el Ministerio Público, que ya abrió una carpeta investigativa.
El Sernac detalló que el modelo de negocio de estas empresas se fundamenta en la promesa de vender terrenos que aún no han sido subdivididos ni registrados. Los compradores llegaron a pagar hasta el total del valor por parcelas que, al momento del acuerdo, no existían físicamente ni tenían un rol único asignado.
En el caso de las parcelas en verde, explicaron que “se basa en la promesa de venta de parcelas agrícolas que aún no están subdivididas, de modo que existe un proyecto de parcelación. Al momento de ser adquiridas por las personas consumidoras, estas no contaban con un rol propio”.
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“Este fue el método más usado, ya que los terrenos podían ser adquiridos a un costo más bajo y las personas consumidoras debían esperar entre 1 a 2 años para la entrega. Así, las empresas prometían celebrar un contrato de compraventa, a sabiendas de que era posible que la entrega final jamás se materializara”, agregaron.
La segunda modalidad, menos empleada por las empresas, era la venta de “parcelas con rol único”, terrenos que “ya estaban subdivididas y ya tenían asignado rol propio, siendo posible registrarlas ante el Conservador de Bienes Raíces. Los plazos de entrega variaban entre 30 a 60 días, entregando mayor certeza a los compradores”.
Uno de los puntos centrales que tocó el economista en el programa Influyentes fue la guerra en Ucrania y sus efectos económicos y sociales en Europa.
