1994, campeones como ayer: Se cumplen tres décadas de la histórica hazaña de la U de Chile tras 25 años sin títulos
El club laico alcanzó la gloria el 18 de diciembre de 1994 con un épico empate ante Cobresal en pleno desierto de Atacama.
El alcalde de Ñuñoa aseguró que "me encantaría que podamos hacer asados carnívoros y veganos en la misma parrilla y seamos igual de felices. Y que nadie mire con superioridad moral al otro".
El alcalde de Ñuñoa, Sebastián Sichel, abordó sus primeros días al mando del municipio y también las caricaturas que se han realizado en el último tiempo sobre la comuna.
En diálogo con La Cuarta, Sichel fue consultado sobre su opinión del concepto de “ñuñoíno”.
Al respecto, aseguró que es “una mala caricatura. Yo creo que la gracia de la gente de Ñuñoa es que es más libre que la cresta, que define su propio plan de vida. Y, cuando tú lo categorizas, lo matas”.
“La gracia de ser de Ñuñoa es que si querís ser conservador, eres conservador; si quieres ser liberal, eres liberal; católico o ateo; vegano o bueno para el asado; de izquierda o de derecha. Y cuando esa libertad la transformas en una categoría, la destrozas. Porque dejas de ser libre“, acotó.
En esa línea, aseguró que “entonces el ñuñoíno era vegano, era del Frente Amplio, comía pan de masa madre. Es legítimo hacerlo, pero no es la única forma de ser de Ñuñoa. Por lo tanto, la gran gracia de Ñuñoa creo que es vivir la libertad. Y cuando tú lo encapsulas en un solo concepto, pierdes el valor de Ñuñoa”.
“Y esa caricatura le hizo mal porque estableció como un dibujo a cómo hay que ser de Ñuñoa. Y si no caes en ese dibujo, no eres de Ñuñoa. Hay que romper ese molde -como todos los moldes- porque cuando tú construyes moldes, destruyes la posibilidad de evaluar la diversidad en una sociedad“, añadió Sichel.
Consultado si es que cree que podrá cambiarlo, sostuvo que “quiero cambiarlo. Quiero que el respeto sea la tónica, y no la caricatura. Me encantaría que podamos hacer asados carnívoros y veganos en la misma parrilla y seamos igual de felices. Y que nadie mire con superioridad moral al otro. Y yo voy a pelear por eso”.
“Me he encontrado con mucho gallo del Frente Amplio aquí con mucha superioridad moral. Que hay una forma correcta de ser, de vestirte, de cómo tener el pelo”, sentenció.
El club laico alcanzó la gloria el 18 de diciembre de 1994 con un épico empate ante Cobresal en pleno desierto de Atacama.