Uso de vapeadores: Instituto de Salud Pública identificó “graves daños” a la salud de las personas
Por CNN Chile
15.01.2025 / 08:58
Desde 2013 a la fecha, el Instituto de Salud Pública analizó 193 cargas para uso de vapeadores. Entre los principales resultados, se identificó que el 100% "presenta esencias y saborizantes no autorizados para uso por vía inhalatoria".
El Instituto de Salud Pública (ISP) identificó “graves daños” a la salud de las personas debido al uso de cigarrillos electrónicos y/o vapeadores.
Los vapeadores son descritos por el organismo como un aparato que “posee un depósito o cartucho que, en su interior contiene un líquido con propilenglicol, glicerina, saborizante y otros compuestos químicos que, mediante un sistema electrónico, con una batería y un atomizador, calienta el fluido hasta convertirlo en vapor”.
El aerosol generado es aspirado por las personas, pasando por la boca y el tracto respiratorio, hasta llegar a los pulmones. Luego, es exhalado al ambiente.
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Junto con ello, la combustión de los cigarrillos electrónicos genera más de 20 sustancias tóxicas, las que “alcanzan mayores concentraciones que el cigarro convencional, con potencial de causar cáncer y enfermedades respiratorias, cardiovasculares, neurológicas, bucales, entre otras”.
En ese sentido, y con base a lo informado por la Organización Mundial de la Salud (OMS), el instituto asevera que los cigarrillos electrónicos que contienen nicotina “son perjudiciales para la salud y muy adictivos”.
Asimismo, indican que hay “pruebas alarmantes” sobre los perjuicios que pueden generar a la salud de las personas: “Liberan sustancias tóxicas, cancerígenas, que aumentan el riesgo de sufrir trastornos cardiacos y pulmonares; aún se estudian sus efectos a largo plazo en la salud”.
Productos estudiados
Desde 2013 a la fecha, el Instituto de Salud Pública analizó 193 cargas para uso de vapeadores.
Entre los resultados se identificó que el 100% “presenta esencias y saborizantes no autorizados para uso por vía inhalatoria”.
También se dio cuenta que el 59% de los productos estudiados contenía nicotina que no había sido declarada en el rotulado.
En tanto, un 2,5% contenía cannabidiol y un 1% tenía etanol y acetato de etilo.