El Estado ha implementado distintas estrategias para combatir la epidemia por VIH/sida, como el uso de preservativo, el incentivo a la realización del test rápido y, este último año, el autotest. Sin embargo, en los últimos 12 años, en Chile se ha presentado un incremento del 59%. En CNN Chile entrevistamos a expertos en la materia para analizar los factores que estarían detrás de estas alzas.
En el mundo, los nuevos casos de VIH/sida han disminuido en un 59% desde su peak en 1995 hasta 2022, según cifras de ONUSIDA. Sin embargo, los nuevos diagnósticos en Chile aumentaron un 7% durante el año pasado, de acuerdo a los datos entregados por el Instituto de Salud Pública de Chile (ISP), y 59% en los últimos 12 años (ONUSIDA).
El virus de la inmunodeficiencia humana (VIH) es una infección que afecta y debilita el sistema inmunitario, pues si no se trata el VIH, la persona pasa a una etapa más avanzada, denominada síndrome de inmunodeficiencia adquirida (sida), en la que está más propensa a contraer infecciones y cánceres mortales.
Este virus, que ha costado la vida de millones de personas a lo largo del mundo, ataca independiente del sexo, orientación sexual y edad del individuo. Se transmite a través de relaciones sexuales sin protección, con líquidos corporales como sangre, semen, líquido preseminal, flujos vaginales, flujos rectales y leche materna.
En Chile, los primeros casos de VIH/sida se registraron a partir de 1984. Inicialmente, era “una enfermedad mortal” en la que “todos los pacientes fallecían”, puesto que no había medicamentos que apaciguaran el virus, explica el Dr. Alejandro Afani, del Centro de VIH del Hospital Clínico de la Universidad de Chile.
Si bien ahora existen tratamientos antirretrovirales que permiten controlar el virus y que las personas pasen a ser indetectables -no transmiten el virus a través de relaciones sexuales-, expertos advierten que no significa que haya que restarle la gravedad al asunto.
En Chile, durante los últimos 12 años, la epidemia del VIH/sida ha experimentado un alza de 59%. Se estima que, en general, hay 83 mil personas viviendo con VIH, cerca de 60 mil individuos están con tratamiento y más de 20 mil no lo están recibiendo, detalla el Dr. Afani.
Chile presenta una alta tasa en relación a incidencia y prevalencia dentro de Latinoamérica: en los últimos años se han registrado cinco mil nuevos casos diagnosticados. A pesar de que Argentina presenta la misma cantidad, “ellos tienen tres veces más población que nosotros”, asegura |Afani.
El alza de nuevos diagnósticos por VIH se debe a elementos multifactoriales. El presidente de la Fundación Chile Positivo, Carlos Lobos, lo asocia a la “falta de educación sexual integral” en el país, lo que provoca una falta de conocimiento respecto a las enfermedades de transmisión sexual (ETS) y las infecciones de transmisión sexual (ITS).
Además, agrega que en la población se presenta una baja percepción de riesgo, es decir, hay un pensamiento generalizado de que “esto no me va a pasar a mí”.
Este pensamiento se ha visto reflejado mayoritariamente en “hombres héteros y personas que están casadas”, puesto que el VIH/sida ha sido estigmatizado con la falsa idea de que solo lo contraen “hombres gay, trabajadoras sexuales, personas trans, o que la pareja única es una forma de prevenir y que están seguros y seguras”, apunta Lobos.
Por su parte, el Dr. Afani recalca que ha “habido un relajo en todas las medidas de protección”, principalmente en los jóvenes y adultos jóvenes entre 20 y 35 años, quienes “no tienen autocuidado, ni una sexualidad responsable”. El médico detalla que la mayoría de los pacientes que llegan a su consulta reiteradamente contraen una ITS/ETS como la sífilis y gonorrea por no usar preservativo.
Estas observaciones se complementan con los datos recogidos en la Encuesta Nacional de Salud, Sexualidad y Género llevada a cabo este año por el Ministerio de Salud, que demostró que un 48% de la población de 18 años evaluó que recibió una “muy mala o mala” educación sexual en su establecimiento educacional. Además, evidenció que gran parte de la población no conversó sobre cómo evitar una ITS en su primera relación.
Hace un tiempo, el VIH/sida no era considerado “como una enfermedad prioritaria” en la administración sanitaria, lo cual provocó que “no se tomaran adecuadamente políticas públicas”, dice Afani.
Si bien, a partir de la década de los ’90 se comenzaron a implementar estrategias y mecanismos de prevención del VIH, la mayoría de las campañas se centraron solo en el uso del preservativo, dejando de lado otras formas de prevención y autocuidado que involucren a los múltiples individuos de la sociedad civil.
Móvil de test rápidos de VIH (2019). Agencia UNO
El doctor Alejandro Afani opina que “hay que intensificar de manera significativa las estrategias para poder reducir estas cifras”, y dice que se ha dejado de lado el dar a conocer a las personas portadoras del virus que pueden atenderse en centros de salud mediante las GES. También acusa que hay poca promoción del tratamiento de profilaxis preexposición (PrEP) para personas seronegativas, el que “logra reducir la transmisión por VIH a más de un 95%”.
El profesional reflexiona que a la fecha se debe ejecutar una estrategia integral que esté combinada con el uso del condón masculino y femenino, y que incluya educación y consejería al respecto. Además, plantea la necesidad de que haya más promoción del testeo rápido y autotesteo para aumentar el diagnóstico y tratar a las personas con VIH precozmente. Estas medidas son relevantes, pues un grupo considerable de personas portadoras de VIH llegan tarde a su diagnóstico, con su sistema inmunitario ya muy dañado.
Este año, el Ministerio de Salud se sumó a la estrategia del autotest VIH para manejar y controlar las altas cifras por este virus en el país.
La prueba la pueden realizar las personas que sospechen que han estado expuestas al virus y lo hagan de manera rápida y confidencial.
Se recomienda hacer este test tres meses después de la última práctica sexual de riesgo.
El kit de autotesteo VIH se puede encontrar en distintas farmacias del país a un precio que ronda los $12.000. También se puede obtener de manera gratuita en algunas ONG y en centros de salud de las regiones de Arica y Parinacota, Tarapacá, Antofagasta, Coquimbo, Valparaíso, Los Lagos, Araucanía y Magallanes.
Para realizar el autotest de VIH, la persona debe realizar los siguientes pasos:
Pasado los minutos, el test revelará una o dos líneas según el resultado.
Si es negativo, aparecerá una raya solo en la “C”.
El resultado es positivo cuando aparecen dos líneas en la “T” y “C”, incluso si no están muy marcadas. Si arroja positivo se recomienda acercarse a un centro de salud para pruebas complementarias.
Si no aparece una raya o solo esté marcada la “T”, quiere decir que la prueba no funcionó. Puede repetir el autotest o dirigirse a un centro de salud.
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