Una tarjeta de crédito bien utilizada ayuda en tu planificación financiera. Permite gestionar tu flujo de efectivo, aprovechar beneficios y ofertas, consolidar deudas a tasas más bajas y mejorar tu historial crediticio.
Planificar tus finanzas es clave para mantener estabilidad y alcanzar metas personales. Tener claros tus ingresos y gastos te lleva a tomar decisiones inteligentes y a evitar situaciones inesperadas que puedan afectar tu calidad de vida.
En ese sentido, una tarjeta de credito, utilizada de manera responsable, te ayuda a organizar mejor tu dinero, ya que no solo te permite acceder a recursos en momentos de necesidad, sino también administrar tus pagos y aprovechar una serie de ventajas.
Cuando escuchas hablar de tarjetas de crédito, probablemente pienses en compras y pagos diferidos.
Pero ¿sabías que también pueden ser útiles para gestionar tus finanzas?
Una tarjeta de crédito te permite diferir pagos y organizar tus gastos mensuales.
Si planificas tus compras en torno a las fechas de facturación y pago, puedes utilizar los días sin interés como una especie de préstamo gratuito.
Lo anterior es útil para cubrir gastos inesperados o realizar compras grandes sin afectar tu presupuesto.
Eso sí, recuerda no gastar más de lo que puedes pagar al final del mes. Lleva un registro claro de tus compras para asegurarte de que siempre estarás dentro de tus posibilidades económicas.
Muchas tarjetas de crédito ofrecen programas de beneficios que incluyen descuentos, acumulación de puntos, y más. Son incentivos que pueden sumar importantes ahorros si los integras a tu rutina de compras diarias.
Por ejemplo, puedes usar una tarjeta con descuentos en restaurantes para tus salidas o acumular recompensas en tus pagos recurrentes para aprovechar ofertas y beneficios exclusivos.
Ahora bien, elige ofertas que se ajusten con tu estilo de vida y necesidades.
Si estás agobiado con deudas en varias tarjetas o créditos que cobran intereses altos, algunas tarjetas de crédito te dan la opción de traspasar esas deudas a su saldo, con intereses reducidos o incluso sin intereses por un tiempo específico (por ejemplo, 3 meses).
Esto puede ser útil porque:
Pagar a tiempo y mantener un saldo bajo con respecto a tu límite de crédito demuestra a las instituciones financieras que eres un cliente confiable.
Así, un buen historial crediticio te abre puertas a mejores oportunidades, como créditos hipotecarios o de consumo con tasas más favorables.
Básicamente, tu tarjeta actúa como una llave para desbloquear mejores ayudas financiera y ventajas en el futuro.
Para que tu tarjeta de crédito sea un aporte en tus finanzas, se debe utilizar con responsabilidad y planificar su uso:
Cuando se usa de manera consciente y estratégica, una tarjeta de credito puede ser mucho más que un método de pago: se convierte en una herramienta para alcanzar tus metas financieras.
Planifica, infórmate y haz de este recurso un compañero en tu camino hacia la estabilidad y el crecimiento económico.
La iniciativa, impulsada por Conecta Mayor UC, la Pontificia Universidad Católica de Chile y El Mercurio, destaca a figuras de nuestro país mayores de 75 años y que aportan desde sus diversos ámbitos al país.
