La huelga se llevó a cabo este miércoles, a dos días de que la empresa salga a la bolsa.
Miles de conductores de Uber y Lyft salieron a las calles en distintas ciudades del mundo para reclamar que las empresas para las que trabajan son cada vez más lucrativas y que no están recibiendo lo que les corresponde.
Las huelgas se sintieron en varias ciudades de Australia y Estados Unidos, y también en Chile, donde, por ejemplo, en Punta Arenas hubo un 90% de adhesión al denominado apagón masivo.
A diferencia de los taxistas de Nueva York, por ejemplo, los conductores de estas aplicaciones no tienen cobertura de salud ni beneficios familiares. Tampoco cuentan con facilidades para echar combustible o garantías en caso que se les eche a perder el auto. Por el contrario, a penas cuentan con el derecho de formar parte de la red.
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Esta protesta se da en la previa de la salida de Uber a la bolsa de Wall Street este viernes. La empresa, que actualmente está siendo avaluada en 10 mil millones de dólares, venderá acciones entre 44 a 50 dólares.
Esto mismo causa molestia en los trabajadores, quienes en un inicio podían quedarse con el 80% y la empresa con el 20%, pero pese a que Uber ha ido ganando más dinero, eso en algunos casos no ha cambiado y en otros incluso ha disminuido.
El caos en algunas ciudades -particularmente europeas- fue significativo este miércoles. Hay países en los que la población depende mucho de Uber para transportarse.
Uber manifestó disposición a conversar con los conductores y llegar a un acuerdo para entregarles más beneficios.
La periodista de CNN Chile agradeció la distinción y recordó la trayectoria de Correa, quien es recordada como la entrevistadora más importante de la historia de Chile.
