Irán capturó este viernes dos barcos petroleros británicos en el Estrecho de Ormuz. La Guardia Revolucionaria de Irán detuvo a las naves y su tripulación, argumentando que habían ingresado a sus aguas territoriales. A una de las embarcaciones se le permitió seguir con su trayecto, mientras que la otra, llamada Stena Impero, y sus 23 ocupantes permanecen bajo custodia. Este incidente ocurre en medio de una creciente tensión en el Golfo Pérsico. Ayer el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, aseguró que la Armada de su país derribó un dron iraní en el Estrecho de Ormuz, aunque esto fue negado por Teherán. Trump subrayó que las naves capturadas hoy “no son estadounidenses” y defendió su política hacia Irán, marcada por su decisión, en 2018, de retirarse del acuerdo nuclear con ese país.