Durante el fin de semana se entregó el Premio Nobel de la Paz 2023, siendo escogida la activista iraní Narges Mohammadi. Sin embargo, no pudo asistir a la ceremonia debido a su condena de 31 años y 150 latigazos por defender a los presos políticos contra la pena de muerte y oponerse al uso del hiyab obligatorio. También ha sido acusada de propaganda contra el régimen y amenazar la seguridad nacional. En ese contexto, CNN conversó con los hijos de la activista acerca del reconocimiento de su madre y la situación en Irán. “No estamos aquí solo por nuestra familia, sino que también por la libertad y la democracia. Nos sentimos orgullosos de nuestra madre”, relató Kiana Rahmani.